Altamira. – Campesinos se dicen decepcionados de las autoridades federales, luego de que cerraran en definitiva el Tribunal Agrario de Altamira, lo que ocasionara que muchos juicios queden pendientes; ahora tendrán que trasladarse a Ciudad Victoria.
Mario Alberto Reyes Cantú, coordinador de la Central Cardenista Nacional informó que por dos meses estuvieron demandando una solución y que la Justicia Agraria estuviera a favor de los justiciables, pero, no fue así, al contrario, pisotearon los derechos.
El desalojo ocurrió días después de que la Guardia Estatal interviniera para asegurar el traslado de documentos agrarios, en cumplimiento del acuerdo 2/2025 del Tribunal Superior Agrario, publicado el pasado 7 de enero, mediante el cual se reorganizaron varias sedes en el país, incluida la número 30-A de Altamira.
Hizo de manifiesto que aun cuando el campamento fue retirado de manera pacífica por los ejidatarios de la región sur, la lucha por el retorno del tribunal al municipio continuará.
“Este retiro no es una derrota. Es el cierre de una etapa. Lo hacemos de manera voluntaria y con la firme convicción de que el reclamo por un tribunal en Altamira es justo y necesario”, declaró.
Asimismo, cuestionó la autoridad del Tribunal Superior Agrario para mover las sedes sin consultar a los afectados, señalando que el traslado a Ciudad Victoria representa un serio obstáculo para los campesinos, quienes deberán recorrer hasta 500 kilómetros para gestionar sus asuntos legales.
La sede en Altamira, ubicada entre las calles Vicente Guerrero y Capitán Pérez, había sido inaugurada apenas un año antes y cerró sus puertas el pasado 31 de enero.
A partir de ahora, la oficina de Ciudad Victoria atenderá casos de seis municipios: Aldama, Altamira, Ciudad Madero, El Mante, González y Xicoténcatl.
Por su parte, los municipios de Tampico, Antiguo Morelos y Morelos quedarán bajo la jurisdicción del tribunal con sede en Ciudad Valles, San Luis Potosí.
Por último, dice tener esperanza de que la ley que permitió estos cambios sea modificada próximamente por el Congreso Federal, “tenemos confianza en que los diputados federales atenderán este reclamo legítimo. Nos vamos con la frente en alto porque la lucha sigue, y seguiremos exigiendo una justicia agraria cercana y accesible”.