La secretaria de Educación, Lucía Aimé Castillo Pastor afirmó que Tamaulipas está listo para atender a los hijos de paisanos y migrantes que puedan regresar al estado tras ser deportados de Estados Unidos.
Ante la expectativa de que el gobierno de Donald Trump incremente las deportaciones en los próximos meses, las autoridades estatales afinan estrategias para garantizar la incorporación de menores al sistema educativo local.
Comento que Tamaulipas es una entidad con alta movilidad escolar y migratoria y eso, los obliga a tener una capacidad constante para registrar y atender a los estudiantes, asegurando su derecho a la educación.
Se prevé que el mayor flujo de deportados llegue a los municipios fronterizos, lo que podría llevar a utilizar gimnasios y otras instalaciones como aulas provisionales.
Castillo Pastor subrayó que actualmente existe infraestructura suficiente para absorber a los nuevos estudiantes migrantes.
Además, mencionó que trabajan en coordinación con las políticas del gobierno federal y siguen las instrucciones del gobernador para responder rápidamente ante cualquier contingencia en la frontera.
Reconoció que la situación se complica cuando menores de edad son deportados sin compañía de adultos, lo que demanda atención especializada.
La funcionaria explico que existen diferentes escenarios: niños que llegan solos y otros acompañados por algún adulto, y cada caso requiere un enfoque particular, tanto en servicios educativos como de otra índole.
Mientras tanto, más de 700 mil alumnos de nivel básico reanudarán clases este miércoles, tras el periodo vacacional decembrina.