Los festejos por la temporada navideña han dejado un resultado favorable para el comercio formal no solo de Victoria, sino de todo el estado. De acuerdo con el presidente de la Federación de Cámaras de Comercio (Fecanaco) en Tamaulipas, Abraham Rodríguez Padrón, las ventas del período alcanzaron los 12 mil millones de pesos, lo que significa un crecimiento de aproximadamente un 10% en comparación con el año anterior (2023).

El análisis realizado por Fecanaco indica que factores como el pago de salarios, primas vacacionales, aguinaldos, vacaciones y fondos de ahorro fueron los que contribuyeron significativamente al incremento de la derrama económica.

“Al corte del 31 de diciembre, estimamos que la derrama económica de diciembre fue superior a los 12 mil millones de pesos, superando nuestras expectativas y alcanzando un crecimiento de más del 10% respecto al mismo período del año anterior (2023)”, señaló Rodríguez Padrón.

Este fenómeno se ha notado especialmente en los municipios más grandes del estado, como Reynosa, Matamoros, la zona de Tampico-Madero-Altamira y Victoria, los cuales experimentaron un repunte en la actividad económica durante las festividades. En particular, Reynosa reportó una derrama económica cercana a los 2 mil millones de pesos, mientras que Matamoros alcanzó alrededor de los 1,300 millones de pesos en el mismo período.

El presidente de Fecanaco explicó que las principales fuentes de este crecimiento provienen de gastos relacionados con las cenas de Nochebuena y Año Nuevo, compras de ropa y calzado, y la adquisición de productos y servicios como gasolina, llantas y mantenimiento de vehículos. Además, destacó el impacto positivo del turismo interno y externo, ya que muchas personas viajaron dentro y fuera del estado durante las fiestas.

Sin embargo, aunque las ventas aumentaron en diciembre, ahora se espera una disminución en los consumos a partir de esta semana debido a los efectos de la denominada ‘cuesta de enero’.

“Después de los gastos navideños, la gente suele destinar su dinero a pagar sus tarjetas de crédito, lo que limita su capacidad de gasto en los primeros meses del año”, afirmó.

Se estima que, una vez que pasen los festejos del 6 de enero, las familias comenzarán a apretarse el cinturón, ya que, entre la escalada de precios que se presenta al inicio de cada año y el pago de las deudas adquiridas, las personas comenzarán a priorizar sus gastos.