NUEVO LAREDO, Tam., 19 de julio.— Un total de 350 pacientes en control tiene el Centro Ambulatorio Para la Atención del Sida y otras Infecciones de Transmisión Sexual (Capasits) en Nuevo Laredo, de los cuales 43 ingresaron en este 2021.

Juan Francisco Ortiz Brizuela, director del Capasits en la ciudad dijo que al mes ingresan alrededor de seis a siete pacientes con la enfermedad.

“Este año hemos visto que la gran mayoría de los pacientes que nos llegan para un diagnóstico, son positivos, nos damos cuenta desde la sintomatología, nos están llegando muy avanzados con la enfermedad y en estas circunstancias las posibilidades de sobrevivir son menores”, expresó.

Comentó que, de enero a la fecha, han muerto 10 personas por VIH-Sida, de los cuales un paciente falleció por complicaciones con COVID-19.

“La mayoría de estas defunciones son derivadas a una tardía atención médica por parte del enfermo, que al llegar a la etapa final de la enfermedad decide comenzar su tratamiento antiviral”, aseguró.

Señaló que en su gran mayoría son pacientes que no llevan un control de su enfermedad, y que desgraciadamente llegan con complicaciones, se les atiende, pero desafortunadamente ya no pueden recuperarse.

“Si el paciente abandona el tratamiento retroviral, el virus del Sida comienza a expandirse rápidamente, provocando una disminución en las defensas del cuerpo, las personas que han contraído el VIH oscilan entre los 25 y 45 años, de los 350 pacientes que tenemos en control 84 son mujeres el resto son hombres”, subrayó.

Ortiz Brizuela agregó que constantemente exhortan a los pacientes para lleven a cabo todas las medidas de sanidad, para evitar que sean contagiados de coronavirus.