Por la falta de definición sobre un posible descuento en el costo de la licencia de alcoholes, cerca de cien restaurantes de esta capital tendrían que suspender temporalmente ese servicio o quedar en el borde de la ilegalidad si continúan ofreciéndolo, al concluir en este mes la prórroga para refrendar el permiso respectivo.
“Seguimos esperando la respuesta”, señaló el el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC), Jorge Bello Méndez, quien explicó que las autoridades del ramo concedieron el mes en curso como plazo para que los negocios de alimentos y bebidas se pongan al corriente en esa licencia.
Bello Méndez confió que en el curso de esta semana el Gobierno del Estado otorgue una respuesta positiva a la petición de los negocios involucrados.
Para finalizar, apuntó que el problema no atañe a todos los afiliados a la Cámara porque no es el cien por ciento el que ofrece consumo de bebidas alcohólicas, “pero de los alrededor de 180 socios, un centenar sí maneja ese servicio, importante para la economía de los negocios”.