La seguridad de los diversos candidatos a puestos de elección popular en Tamaulipas debe de estar garantizada por las autoridades electorales a instancias de la federación y estado.

Los hechos violentos que han “Manchado” estas elecciones, el primero registrado en el municipio de Altamira por un presunto intento de secuestro contra de una candidata y posteriormente en esta capital con el crimen del abanderado del PVEM hace necesario se brinden las condiciones de paz que tanto anhela la ciudadanía.

Jorge Manaotuo Saucedo abogado constitucionalista considera que es necesario que se ponga en marcha un blindaje de seguridad que permita que estas elecciones no se sigan manchando por la inseguridad.

La seguridad del proceso electoral que vive el país y Tamaulipas es responsabilidad del Estado a través de sus autoridades de seguridad pública, aunque no hay indicios de que la inseguridad afecte las elecciones.

Desde el punto de vista legal y constitucional el árbitro electoral (Ietam e Ine) son las autoridades responsables y en los sitios donde se registre mayor competencia o haya una cerrada contienda se tiene que dar vista a la federación y estado.

Hay que destacar que ya son los candidatos, casualmente son mujeres, las que han solicitado seguridad para sus campañas y entornos de sus familias.

Tamaulipas está viviendo una de las elecciones de las más competidas en la historia política donde estarán en juego las 43 alcaldías, congreso local y diputaciones federales.

A pesar de no tener detectadas en Tamaulipas zonas de riesgo, es forzoso reforzar la seguridad.