Ante el deterioro visible de varios inmuebles y sitios emblemáticos de Victoria, el cronista de la ciudad, Francisco Ramos Aguirre, propuso la creación de un organismo ciudadano que reúna a autoridades, empresarios y sociedad civil para impulsar un plan permanente de conservación y rescate del patrimonio histórico.

Cuestionado sobre el estado actual de los centros históricos, Ramos Aguirre mencionó que espacios como la antigua estación del ferrocarril, el panteón del Cerro Morelos y diversos edificios del primer cuadro de la ciudad muestran un grado de abandono que requiere atención inmediata.

El cronista subrayó que la preservación de estos sitios no debe recaer únicamente en el gobierno, sino que debe ser resultado de una “unión de esfuerzos” entre todos los sectores sociales.

“Tiene que haber un plan emergente de reestructuración y reordenamiento del uso de los espacios. No se trata de señalar responsables, sino de ponernos de acuerdo para devolverles su función original y conservar su valor histórico”, expresó.

Ramos Aguirre consideró necesario establecer un modelo similar al que aplican ciudades como San Luis Potosí, Monterrey o Saltillo, donde existen políticas públicas claras en materia de conservación, imagen urbana y sanciones por daños al patrimonio.

El cronista propuso que el nuevo organismo pueda trabajar en coordinación con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y el Ayuntamiento de Victoria, con el propósito de dar seguimiento a programas de restauración y supervisar el cumplimiento de las normas sobre mantenimiento de edificios y espacios con valor histórico.

“Este consejo o instituto podría estar integrado por representantes de la sociedad civil, del sector empresarial y de organismos como la Canaco, para que además de opinar, puedan contribuir activamente al rescate de la ciudad”, explicó.

Además, Ramos Aguirre hizo un llamado a fomentar una cultura de cuidado y limpieza urbana, recordando que mantener en buen estado las áreas públicas también es una forma de proteger la identidad local.

“La conservación de la ciudad no solo depende de restaurar sus muros, sino de mantener limpios los espacios, respetar los horarios de recolección de basura y evitar arrojar desechos en calles y plazas. Es un tema de educación y cultura ciudadana”, enfatizó.

Finalmente, destacó que la creación de este organismo podría convertirse en el punto de partida para recuperar el orgullo y la identidad de los victorenses.

“No se trata únicamente de conservar edificios, sino de preservar la historia viva de nuestra ciudad”, concluyó.