Victoria, Tamaulipas.- Representantes de cuatro asociaciones estatales de jubilados y pensionados del ISSSTE alzaron la voz para exigir la destitución inmediata del actual subdelegado de prestaciones económicas, Tomas Sánchez Lara, acusándolo de adoptar una actitud prepotente, déspota y carente de preparación para el cargo.

La manifestación fue encabezada por el profesor Cristóbal Castillo Ríos, presidente de la Asociación por la Dignificación del Jubilado y Pensionado del ISSSTE y del Gobierno del Estado, y el profesor Manuel Valderas Turrubiates, coordinador general de la Asociación de Jubilados y Pensionados Federales A.C. quienes denunciaron la imposición de este funcionario que, aseguran, no cumple con el perfil necesario ni con los requisitos de experiencia estipulados.

“Esta persona llegó de manera unilateral, sin ser consultados los representantes de las asociaciones. Su comportamiento hacia el personal y los derechohabientes ha sido ofensivo, y ya incluso se nos ha prohibido la entrada a las oficinas”, afirmó Valderas Turrubiates.

Los líderes señalaron que el nombramiento se hizo sin considerar la normativa del Sistema de Atención Integral al Jubilado (SAIJU), lo que ha generado inconformidad entre miles de jubilados.

También advirtieron que, de no recibir respuesta favorable por parte del Gobierno del Estado ni de la Dirección General del ISSSTE en Ciudad de México, procederán a tomar las instalaciones.

“El documento fue enviado el pasado 14 de mayo al licenciado Martín Batres en la Ciudad de México. Este es el segundo llamado. Si no hay respuesta en una semana, procederemos a tomar otras medidas, incluida la toma de la subdelegación”, indicó el profesor Castillo.

Uno de los problemas más graves, denunciaron, es la falta de infraestructura para atender la demanda estatal de trámites, como la expedición de credenciales, lo que obliga a miles de derechohabientes, muchos con dificultades para desplazarse, a viajar hasta Ciudad Victoria.

“Hay una sola máquina para procesar credenciales en todo el estado. ¿Cómo esperan atender a más de 30 mil jubilados así?”, cuestionaron.

“En Tamaulipas hay personal con la experiencia y el perfil adecuado para este tipo de cargos. No se justifica traer a alguien externo que ni siquiera conoce el funcionamiento del instituto. Exigimos respeto y un trato digno para quienes hemos dedicado nuestra vida al servicio público”, concluyeron.