El rastro del “proveedor fantasma” que facturó millones en el IETAM y la Secretaría de Salud, también fue hallado en el Instituto Tamaulipeco De Infraestructura Física Y Educativa (ITIFE).

Durante la administración de Francisco García Cabeza de Vaca, se detectaron compras sospechosas a proveedores no localizados, es el caso de PCM Consumibles, que igual facturó material para impresión y equipo de cómputo, que equipamiento para taller industrial, material quirúrgico y otros insumos médicos.

Entre el 2021 y 2022, a través de siete facturas, de las cuales este medio tiene copia, se facturaron más de 1.2 millones de pesos, a una empresa que sigue sin ser localizada en la dirección fiscal que ostenta.

Las siete facturas se pagaron con recursos del ITIFE, a cargo de Juan Patiño Cruz. La factura más reciente data del 31 de marzo de 2022, en donde a través de una transferencia electrónica, se pagaron 243, 763. 56 pesos por concepto de equipo de cómputo.

Antes, en noviembre de 2021 ya se habían pagado a la misma empresa 227, 327.52 pesos por ocho computadoras y 12 reguladores.

Este equipo, fue requerido por el Plantel Victoria del Instituto Tamaulipeco de Capacitación para el empleo (ITACE).

En octubre de 2021, también con recursos de ITIFE, pero, para el plantel Matamoros del ITACE, se facturó una perfiladora al mismo proveedor por 199,997.98 pesos.

En agosto del mismo año, se facturó un video proyector por la cantidad de 12,226.40 pesos, dos computadoras portátiles por 54,848.28 pesos, nueve computadoras de escritorio por 235,944.00 pesos y un sistema de formación para neumática, compresor de aire y manguera por 301,115.70 pesos.

Esta última compra se sustentó en la firma del contrato de equipamiento para Taller Industrial del Plantel Reynosa del ITACE, por 301,115.70 pesos, firmado el 28 de octubre de 2021.

Este proveedor, ya fue identificado en otras dependencias del Estado y órganos electorales durante la administración de Cabeza de Vaca.

La dirección fiscal que otorgó al Servicio de Administración Tributaria y a la Secretaría de Administración del Gobierno del Estado, en el municipio de Apodaca, Nuevo León, es una casa de intereses social, donde los habitantes niegan tener relación alguna con la empresa.