Siendo las farmacias catalogadas como una actividad esencial por lo que pueden abrir sin problemas y vender productos varios además de medicamentos; son negocios que han ampliado sus servicios, contando lo mismo con consultorios médicos que con ventas de abarrotes.

El Presidente de la Asociación Farmacéutica Regional, Tofic Salum Fares, menciona que la ampliación de servicios de las farmacias es por atender las necesidades de la ciudadanía que ya se ha acostumbrado a que solo se tienen a la venta medicamentos, sino que pueden encontrar una diversidad de artículos de primera necesidad como son los abarrotes entre otros.

Reconoce que en un inicio de la pandemia por el COVID-19, las autoridades sanitarias verificaban y clasificaban los productos que, si se pueden vender, como son los de limpieza e higiene, pero ahora ya ha ampliado la venta de una gran variedad de artículos que la población puede adquirir en las farmacias.

En cuanto a los abarrotes que normalmente se encuentran en las farmacias, es una práctica que se tiene desde hace tiempo, al igual que la prestación de servicios médicos siendo notable el funcionamiento de consultorios clínicos.

Agrega que con todo lo anterior, el negocio farmacéutico no se ha visto afectado por la pandemia del COVID-19, ya que por obvias razones es un giro esencial que no en esta contingencia sanitaria ha salido adelante.

Considera que las farmacias en general son negocios que han asumido con responsabilidad social los estragos de la pandemia en la salud de la población, lo que los ha llevado a respetar los precios marcados en las medicinas, además de tener a disposición y sin contratiempos los medicamentos que se requieren, así como productos de consumo y otros servicios.