A pesar de que la Secretaría de Educación en Tamaulipas (SET) insiste en que la inscripción a las escuelas públicas es gratuita, padres de familia denuncian que deben pagar cuotas para asegurar el acceso de sus hijos a la educación.

Alma Idalia, madre de familia, asegura que este año deberá pagar 3 mil 550 pesos por la inscripción de su hija, un monto que considera excesivo considerando que la educación debería ser gratuita. “El año pasado batallé mucho. Me hicieron hacer un convenio para pagar casi 600 pesos semanales, y hasta que no liquidé, no pude sacar a mi hija”, relató.

Por su parte, Ismael destaca que, aunque la Secretaría de Educación afirma que no es obligatorio pagar para inscribir a los niños, en la práctica sí se exige una aportación.

“Siempre lo han manejado como ‘aportaciones voluntarias’ a través de las sociedades de padres de familia, pero si no pagas, no aceptan a los niños”, señala.

María coincide en que el cobro de cuotas es una práctica habitual en las escuelas públicas, disfrazada de contribución opcional. “Siempre se ha pagado, ya sea en primaria o secundaria. Se supone que es para mantenimiento o artículos de aseo, pero aparte de la cuota, también te piden llevar material”, explicó.

El cobro de cuotas escolares, lejos de ser un caso aislado, es una práctica extendida en muchas escuelas, lo que pone en entredicho el principio constitucional de educación gratuita.

Mientras las autoridades educativas insisten en que los pagos no son obligatorios, los padres de familia viven una realidad muy distinta en el proceso de inscripción.