La diputada Marina Ramírez Andrade exigió garantizar transporte médico municipal para impedir que miles de personas pierdan consultas, estudios y tratamientos por no poder pagar traslados.
Además, la legisladora afirmó que muchas familias viven una disyuntiva diaria porque deben elegir entre comer o costear un viaje para recibir atención médica básica o especializada.
Asimismo, Ramírez Andrade explicó que acudir a una consulta, estudio, rehabilitación o seguimiento médico se vuelve un reto que afecta diagnósticos oportunos, terapias continuas y resultados clínicos.
Incluso, advirtió que el derecho a la salud queda en simple letra muerta cuando no existe movilidad para llegar a clínicas, especialmente en comunidades pequeñas sin atención especializada.
También destacó que algunos municipios ya operan transporte médico programado para adultos mayores, embarazadas, personas con discapacidad y familias vulnerables mediante vehículos oficiales de apoyo.
Sin embargo, la diputada señaló que estos programas dependen de cada administración y muchas veces desaparecen con los cambios de gobierno, afectando a quienes dependen del servicio.
Por ello, propuso adicionar los artículos 170 y 170 Bis al Código Municipal para reconocer y regular permanentemente el transporte médico como mecanismo institucional de movilidad social.
Ramírez Andrade afirmó que con el respaldo del Congreso se puede dar un paso firme, responsable y profundamente humano por las familias que necesitan llegar a tiempo a sus citas.