El Hospital General del IMSS en Victoria enfrenta serias críticas debido a un trato que califican de “inhumano” los derechohabientes y de severas carencias en farmacia, donde no tienen ni lo básico para regular la presión arterial.

La falta de doctores especialistas para consultas programadas, y la carencia de medicamentos esenciales para enfermedades crónico-degenerativas, son otras de las quejas de los pacientes, y derechohabientes aseguran que en repetidas ocasiones han tocado la puerta del delegado Federico Héctor Marín Martínez, para exponerle la situación, pero no los recibe. 

“Llevo meses esperando una consulta con mi especialista, pero siempre me atiende alguien diferente que no sabe de mi caso”, comenta un paciente afectado.

El mismo paciente señala que de nada sirve que en la plantilla de médicos haya especialistas si no se presentan a consulta y, cuando lo hacen, los tiempos de espera para ser atendidos son excesivamente largos, de varias horas. 

“El tiempo de espera es desesperante y después de la consulta tenemos que hacer largas filas para surtir nuestras recetas”, comenta María, otra paciente.

María denunció ante El Mercurio la falta de telmisartán, un medicamento crucial para controlar su presión arterial.

“Tengo que pedirle a mi hija que lo compre, lo que me cuesta más de 200 pesos. He venido varias veces y nunca lo tienen en inventario”, señaló con frustración. 

Otro caso similar es el de Guadalupe, quien también denunció la falta de medicamentos para su madre: “El servicio es pésimo. Vine por el medicamento de mi mamá, pero no lo tienen, me dijeron que hasta la próxima semana”, manifestó.

Las largas filas en la farmacia del hospital son otra queja recurrente; los enfermos a menudo se ven obligados a retirarse sin sus medicamentos por el burocratismo. 

Esta situación es especialmente crítica para personas con discapacidad en las extremidades inferiores y adultos mayores, quienes encuentran extremadamente difícil esperar tanto tiempo de pie.

 “No podemos seguir soportando este viacrucis cada vez que necesitamos atención médica, es inhumano”, concluyeron.