Por ejercicio abusivo de funciones y tráfico de influencias el Fiscal Anticorrupción, Raúl Ramírez Castañeda, fue denunciado ante la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas, por el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Finanzas del Estado de Tamaulipas, Raúl Hernández Chavarría.

Al llamado “Zar Anticorrupción” se le señala de haber entregado beneficios económicos a familiares y nombramientos a personas sin la preparación académica requerida.

En la denuncia se señala que Ramírez Castañeda, cuando se desempeñaba como titular de la UIFE, en ejercicio de sus funciones realizó un acto jurídico que produjo beneficios económicos a su descendiente, en el presente caso, su hijo Carlos Emiliano Ramírez Pizarro y además favoreció a su cuñado Ricardo Pizarro Pizarro, quien sin ser abogado de profesión y cuyo grado máximo de estudios es el nivel de secundaria, fue designado como auxiliar jurídico de la UIFE.

Además, señala la denuncia, benefició a quien formaba parte de su despacho particular “Ramírez Castañeda y Asociados”, Gloria Luz Buendía Mestas, otorgándole el cargo de jefa del Departamento de Extinción de Dominio y Amparo en la UIFE.

La denuncia precisa que “los hechos denunciados tienen la apariencia de los delitos de ABUSO DE AUTORIDAD previsto por el artículo 212, fracciones IX y XI, EJERCICIO ABUSIVO DE FUNCIONES, previsto por el artículo 226, fracción I y TRÁFICO DE INFLUENCIAS previsto por el artículo 228, fracción III, todos del Código Penal para el Estado de Tamaulipas”.

Las tres personas que señala la denuncia, renunciaron a su puesto de trabajo al inicio de la administración y según consta en los reportes de Raúl Hernández, nunca desempeñaron sus funciones, pues no acudían a laborar.

La ley prohíbe que los servidores públicos, en el desempeño de su empleo, cargo o comisión, realicen cualquier acto jurídico que produzca beneficios económicos al propio servidor público, a su cónyuge, descendiente o ascendiente, parientes por consanguinidad o afinidad hasta el cuarto grado, a cualquier tercero con el que tenga vínculos afectivos, económicos o de dependencia administrativa directa, socios o sociedades de las que el servidor público o las personas antes referidas formen parte, lo que se tipifica como delito de ejercicio abusivo de funciones.

También prohíbe a los servidores públicos que en el ejercicio de sus funciones o con motivo de ella otorguen empleo, cargo o comisión públicos que sean remunerados, sabiendo que no prestará el servicio, lo que el Código Penal de Tamaulipas señala como delito de Abuso de Autoridad.

Aún con lo establecido en la Ley, Raúl Ramírez Castañeda, en el ejercicio de sus funciones, ya siendo titular de la Fiscalía Especializada en el Combate a la Corrupción también otorgó empleos, a parientes y amigos y gestionó la designación de su hijo Carlos Emiliano Ramírez Pizarro, sabiendo que no prestaría el servicio para el que se le nombró o que no cumpliría el contrato otorgado.