La Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente reconoció que en Tamaulipas existe un severo déficit de bancos de materiales, llamados “pedreras”, para dar cobertura total a la demanda de obra, que además de la pública ya alcanzó también al sector privado en toda la geografía estatal, lo que ha ocasionado un estancamiento de la industria de la construcción.
El subsecretario del ramo Karl Heinz Becker Hernández dijo que se tiene un registro de apenas 17 bancos de arena, grava, piedra triturada o escoria, que se usa con un medio cementante para formar concreto o mortero hidráulico, por lo que la volumetría está desfasada y sobre todo cuando las que vienen operando lo hacen de forma irregular y son sancionadas.
“Ya había cierto tipo de actividad, desde la administración pasada ya estaba operando, tienen que tener impacto ambiental y permiso de extracción, tenemos 17 en línea y son muy pocas, porque eso los estamos convocando para ser reguladas, están ubicadas en el área de El Mante y pegado hacia la sierra, otras en Reynosa, y si hacemos una relación de la cantidad de obras que se realizan con los bancos de materiales con permiso, la volumetría no da”, exaltó.
Y es que, hay obras que prácticamente están detenidas y otras que estaban programadas para terminarse en enero.
Refirió que en Tamaulipas conocen las que están reguladas (bancos), otras se activan y desactivan por lo que hay que ver con la Procuraduría Ambiental lo que procede ya que, para la SEDUMA, la parte normativa las que tenemos que son estas (17), pero por la parte sancionadora o las inspecciones que se estén haciendo a los bancos que no cumplan con esto ya entra la Procuraduría Ambiental y hay que preguntarle a Ramiro Lozano.
“Habría que preguntarle al Procurador Ambiental cuántas estuvieron llevando a cabo; obviamente llama mucho la atención por su tamaño la de Rumbo Nuevo, y la importancia, sin embargo, tengo entendido que hay otros, SEDUMA no sanciona; lo que estamos enterados es porque no reunía los permisos ambientales, habría un problema con los polvos que cubren las plantas del alrededor y dañan su vida; los actos coercitivos nosotros no los llevamos a cabo”, reiteró.