A pesar de las campañas de concientización, el 911 continúa enfrentando problemas, ya que la mayor parte de las llamadas que recibe no tienen que ver con emergencias reales.
De enero a junio de este año se contabilizaron unas 600 mil comunicaciones en Tamaulipas, pero solo una de cada cinco fue legítima.
El resto, más de medio millón, resultaron improcedentes, ya sea porque fueron mudas, incompletas o realizadas a manera de burla.
Las cifras del Centro Nacional de Información, instancia del Sistema Nacional de Seguridad Pública, cada semestre mide la forma en que los ciudadanos usan el número de emergencias.
Alrededor del 60 por ciento de los casos válidos estuvieron relacionados con hechos de violencia o seguridad pública: violencia familiar, pleitos en la vía pública, accidentes de tránsito sin heridos y reportes de personas armadas.
Otros rubros que demandaron intervención fueron los accidentes médicos (16%), las peticiones de asistencia por ruidos, vigilancia o fallas de servicios (12%), y las emergencias de protección civil como incendios y enjambres de abejas o contaminación (9%).
El informe marca una reducción ligera en las llamadas falsas respecto al mismo periodo de 2024, pero se aclara que la magnitud del problema sigue siendo alta, ya que por cada llamada real, se registran ocho que distraen al personal de seguridad y auxilio.
Además, la mayoría de las improcedentes (casi 77%) fueron mudas y el resto fueron en insultos, bromas hechas por niños y adolescentes, o pruebas de marcación.