Tamaulipas despliega todas sus herramientas ante la amenaza de Donald Trump de una deportación masiva de migrantes.
Los consulados refuerzan su asistencia legal y humana y sea puesto en marcha un botón de alerta contra posibles detenciones arbitrarias.
También el sistema DIF Tamaulipas y organizaciones de asistencia como la casa “Senda de Vida 1 “ de Reynosa Tamaulipas, han establecido una coordinación de Apoyos ante la amenaza del
Gobierno Electo de Estados Unidos para una Deportación Masiva.
Patricia Eugenia Lara Ayala Directora del Sistema Estatal DIF y el pastor Héctor Silva Luna informaron que tan solo en Reynosa hay más de 25 mil migrantes en tránsito y en espera de ser aceptados por los EU.
En entrevista conjunta informaron que el Gobierno Humanista de mandatario estatal Americo Villarreal Anaya inició los trabajos preventivos de problemas en la salud , alimentación , refugio y abrigo de quienes pudiesen ser deportados por Tamaulipas.
“ De igual forma estamos en comunicación con las Autoridades Migratorias para transportar a sus lugares de origen a quienes así lo deseen “ añadió.
El Pastor Hector Silva Luna Director de Albergues en Reynosa dijo que de cumplirse las amenazas del Presidente Electo Trump, las condiciones de seguridad en los Albergues pudiera colapsar por lo que es necesario incrementar los apoyos en cada uno de estos refugios ahora que también por las bajas temperaturas se incrementará el número de migrantes en estos centros de atención.
“ Estamos atentos para una contingencia de esta naturaleza, habrá que ver la atención de estos más de 20 mil migrantes que tenemos y lo positivo es que en estos momentos no hay migrantes en situación de calle aunque esto puede variar, y regresar a ver plazas y calles llenas de estas personas y sus familias” aseguró.
El 20 de enero, fecha en que Donald Trump toma posesión como presidente, se espera en México un “tsunami” de efectos incontrolables ante la amenaza tantas veces proferida por el republicano de una “Deportación masiva de migrantes” que podría alcanzar los 11 millones de personas.
México y los estados fronterizos como Tamaulipas lleva días preparándose para combatir en el terreno legal y humanitario un posible aluvión de paisanos obligados a retornar, pero también se mantiene en guardia por la posibilidad de que otras tantas personas de terceros países atraviesen por México para volver.
Los municipios fronterizos están en alerta máxima, así como los albergues, las policías y las asociaciones de derechos humanos.