La prueba fue realizada con éxito, tuvo lugar en las instalaciones militares Wallops Flight en el estado de Virginia y en total fueron más de una decena de experimentos para recabar datos de investigación y desarrollo de armas hipersónicas.

Las armas son parte del programa que comparten el Ejército y la Armada de Estados Unidos. Por eso mismo buscaban la información necesaria para el desarrollo de este tipo de armamento.

“El lanzamiento ha ido muy bien. Está previsto que el Ejército lleve a cabo un segundo lanzamiento este jueves, además de otros trece experimentos relacionados con el desarrollo de misiles hipersónicos”, comentó el director de los Programas de Sistemas Estratégicos.

Las armas hipersónicas pueden desplazarse a más de seis mil 400 kilómetros por hora por lo que su detección e intercepción es difícil. Los misiles también pueden variar su altitud y eso hace que puedan evadir los sistemas de defensa con facilidad.