Al igual que en 2014, cuando los enfrentamientos con Hamás dejaron dos mil 252 palestinos y 74 israelíes fallecidos, Israel fortificó sus fronteras con Gaza al desplegar 300 mil militares, incluidos reservistas, tanques y artillería.

También reforzó sus límites con Líbano, donde ayer cruzó fuego con combatientes de Hezbolá, movimiento proiraní y aliado de Hamás.

Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, prometió “aplastar” al grupo terrorista y afirmó que cualquiera de sus miembros podía considerarse un “hombre muerto”. Junto con el exministro de Defensa Benny Gantz anunció ayer la formación de un “gobierno de emergencia” hasta el fin de la guerra con Hamás.

El principal líder opositor, Yair Lapid, no forma parte de la alianza, aunque en un co-municado se precisó que tiene “reservado” un puesto en el gabinete de guerra.

En cinco días de ataques, suman al menos mil 200 muertos del lado de Israel, 169 de ellos soldados, y mil 055 palestinos. Además, decenas de personas fueron tomadas por Hamás como rehenes o están desaparecidas, entre ellas dos ciudadanos mexicanos.

En tanto, durante una reunión en la Casa Blanca, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtió a Irán de tener “cuidado” mientras aumentan las tensiones en Oriente Medio. Ese país ha apoyado por años financiera y militarmente a Hamás.

A UN PASO DE GAZA, 300 MIL TROPAS DE ISRAEL

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, prometió “aplastar” a Hamás y afirmó que cualquier miembro del movimiento islamista palestino podía considerarse un “hombre muerto”.

Tal como lo hizo en 2014, el año con mayores víctimas mortales desde 2008 por los enfrentamientos entre ambas partes (2 mil 252 palestinos y 74 israelíes fallecidos), Israel vuelve a fortificar su frontera con Gaza, por lo que movilizó a 300 mil reservistas y decenas de miles de soldados en torno al enclave palestino y en la frontera norte con Líbano, donde ayer volvió a cruzar fuego con el movimiento proiraní Hezbolá, aliado de Hamás.

En un comunicado, agrupación libanesa aseguró haber apuntado “con misiles guiados a una posición israelí” frente a la aldea de Dhayra

Hamás es como el Estado Islámico”, insistió Netanyahu, idea que ha replicado en diversas ocasiones desde el ataque y añadió que “lo aplastaremos y eliminaremos como el mundo aplastó y eliminó a Estado Islámico”, a través de su cuenta de X.

La agresión por tierra, mar y aire que realizó el grupo palestino dejó más de mil 200 muertos en Israel, entre ellos 169 soldados, según el ejército, así como cientos de civiles masacrados por los islamistas en los kibutz y en un festival musical. Decenas de personas están desaparecidas o como rehenes de Hamás, entre ellas dos mexicanos.

En tanto, el premier Benjamin Netanyahu y el centrista exministro de Defensa Benny Gantz anunciaron ayer la formación de un “gobierno de emergencia” hasta el fin de la guerra con Hamás, que volvió a lanzar cohetes contra Israel mientras la artillería del Estado hebreo machacaba Gaza.

El principal líder opositor, Yair Lapid, no forma parte de la alianza, aunque el comunicado precisó que tiene “reservado” un puesto en el gabinete de guerra.

El gobierno de Netanyahu, controla 64 de los 120 escaños del Parlamento. Con la alianza que firmó con el partido de centroderecha, llegará a 76 legisladores.

Asimismo, en el comunicado se informó que durante las gestiones de éste gobierno de coalición, sólo se presentarán reformas sobre la guerra.