El portavoz del gobierno francés evitó este viernes responder si el presidente Emmanuel Macron asistirá a la Copa del Mundo de fútbol de Catar, después que su predecesor François Hollande dijera que él “no iría” si fuera todavía jefe de Estado.
Es complicado decir de repente a pocas semanas del inicio que de hecho no hay que hacer lo que un centenar de países en el mundo decidieron hace diez años y se acompañó durante diez años”, dijo Olivier Véran en la radio RTL.
El vocero se alegró no obstante del cambio de “mentalidad” sobre la cuestión de si “es razonable climatizar los estadios”, después que “las primeras reacciones hace 10 años fueran si los futbolistas podrían disputar buenos partidos en estadios donde hace mucho calor”.
Mi opinión es que si tuviéramos que tomar hoy esa decisión, no daríamos la Copa del Mundo a Catar, muy probablemente por el desafío climático”, agregó en RTL, sin precisar si el liberal Macron asistirá al mundial.
A dos meses del mundial, (21 de noviembre-18 de diciembre) en esta monarquía del Golfo, los llamados a no seguir este evento deportivo empiezan a aparecer, entre críticas a los derechos humanos y la cuestión climática.
“Si yo fuera el jefe de Estado, no iría”, dijo Hollande (2012-2017) el jueves durante un evento en París, precisando que no puede pedir a los futbolistas “no ir a una competición para la que se prepararon durante años”.
Los diputados del partido izquierdista Francia Insumisa (LFI) pidieron “una respuesta política fuerte de las autoridades francesas” sobre esta “copa inmunda”, al denunciar el “maltrato de los obreros inmigrantes” y “los partidos climatizados [en estadios] a cielo abierto”.