Darle el anillo a tu novia debajo de la Torre Eiffel en París, tomarte selfies con la Sagrada Familia en Barcelona, o incluso, tomar un cappuccino antes del mediodía en las calles de Roma con el Coliseo Romano a unas cuadras, actividades que son relativamente caras, ahora ligeramente costarán más a partir de 2024… y todo, por el permiso para poder viajar a Europa, que se implementará llegando el 2024.

A partir del próximo año, ya no será gratuito ingresar al continente europeo —al menos los del Espacio Schengen— y todos los viajeros originarios de México, América Latina y el resto de los 60 países listados, tendrán que pagar la exención de visados ETIAS (Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes), que permitirá entrar a países de la Unión Europea.

Entonces… ¿Europa va a pedir visa? ¿De cuánto va a ser el costo?

El ETIAS no es un visado en sí, sino un sistema que requiere que las personas de países que actualmente no necesitan visado para entrar a Europa registren sus visitas previamente… como el caso de México y otros países de América Latina. Incluso, también se aplicará para los ciudadanos de Estados Unidos y Canadá. Naciones como Ecuador y Bolivia, además de solicitar forzosamente la Visa, tendrán que tramitar también este permiso.

El costo del ETIAS será de 7.00 euros (unos 7.50 dólares / cerca de 130 pesos mexicanos) y el permiso se sumará a las múltiples tarifas de alojamiento y “turísticas” que ya se aplican en toda Europa. La medida se implementará de forma oficial en 2024, pero aún no hay una fecha exacta de cuándo será. Esta es la lista de países de la región en que los turistas tendrán que solicitarlo.

México
Estados Unidos
Canadá
Guatemala
El Salvador
Honduras
Nicaragua
Costa Rica
Panamá
Colombia
Venezuela
Perú
Brasil
Paraguay
Chile
Argentina
Uruguay

Bueno, no es una visa ¿Para qué sirve la ETIAS? ¿Por qué lo van a implementar?

Este sistema de autorización de viaje recopilará, realizará un seguimiento y actualizará los datos necesarios relacionados con todos los turistas con el fin de determinar si es segura su entrada a los países del espacio Schengen. Esta será válida hasta por tres años o hasta que caduque el pasaporte, lo que ocurra primero. Si obtiene un nuevo pasaporte, y viajará a Europa, deberá obtener una nueva autorización.

Este será usado para los viajes de corta duración, de entre 90 y 180 días (tres a seis meses), con fines turísticos y empresariales. Además, también aplica para a las personas que visitan los países de la Unión Europea por motivos médicos y de tránsito.

El motivo del por qué la Unión Europea aprobó implementar el ETIAS es por motivos de seguridad y de trámites. Debido a la actual crisis migratoria, donde llegan miles de personas sin documentación, la Unión Europea busca garantizar los viajes sin complicaciones en las personas que se aplicará este permiso sabiendo quién está entrando y en dónde se encuentra, así como mejorar la gestión de las fronteras y evitar el ingreso de personas que puedan cometer crímenes y actos de terrorismo.

¿Dónde tramito la ETIAS? ¿Qué requisitos necesito?

El trámite será completamente en línea y estará próximamente disponible a través de este sitio web, cuando sea oficialmente implementado. De acuerdo con las autoridades de la Unión Europea, las solicitudes se tramitarán en “minutos” y la gran mayoría en 96 horas. Sin embargo, es posible que las autoridades europeas puedan denegar o retrasar este permiso en casos extraordinarios, mismos que se resolverían entre 14 y 30 días.

Cuando se implemente, las autoridades europeas sugieren no reservar vuelos ni alojamiento hasta tener la confirmación y la vigencia de la ETIAS, así como los tradicionales documentos de entrada a uno de los países de la Unión Europea —como el pasaporte— a su llegada al aeropuerto o puerto.

Los requisitos son sencillos: Tener un pasaporte válido con una vigencia de al menos 6 meses, expedido en el país de origen, una tarjeta de débito/crédito para pagar la autorización y un correo electrónico donde llegará la confirmación

Tengo pasaporte y la ETIAS ¿Debo preocuparme de algo más?

Sólo de las tasas turísticas que existen en Europa. La mayoría de las ciudades en Europa imponen una “tasa turística” a los visitantes que las visitan. Estos pueden venir en la factura del hotel o alojamiento por aplicación, ya sea desde el inicio o al final del recorrido. Algunas ciudades con exceso de turismo, como la propia Venecia, ya cobran un impuesto adicional para acceder a la “zona histórica”.

Estos impuestos se destinan generalmente a apoyar los servicios públicos afectados por el turismo, como la recolección de residuos y la limpieza de calles. Suelen aplicarse solo durante un período limitado, generalmente de hasta una semana, incentivando a los visitantes a prolongar su estadía.

Fuera de ahí… ¡A disfrutar! Ya sea unos vinos en la Toscana Italiana, el cálido sol en las islas de Grecia, los canales y calles llenas de bicicletas en Amsterdam, el famoso Oktoberfest de Múnich… o los ambientes más fríos e invernarles de Estocolmo y Copenhague.