El Departamento de Comercio de Estados Unidos anunció la aplicación inmediata de un arancel del 17.09% a las importaciones de jitomate mexicano, tras romper el Acuerdo de Suspensión de Dumping de 2019. La decisión se tomó luego de que no se lograra un nuevo entendimiento con el gobierno mexicano.

“Durante años nuestros agricultores han sido víctimas de prácticas comerciales desleales. Eso termina hoy”, sentenció Howard Lutnick, secretario de Comercio, al justificar la medida con el argumento de proteger al campo estadounidense. La acción se alinea con la estrategia comercial impulsada por Donald Trump.

Aunque inicialmente se había planteado una cuota compensatoria del 21.9%, esta no se activó al inicio del lunes como estaba previsto, debido a la falta de notificación oficial a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EU (CBP). El anuncio formal llegó horas más tarde.

La ruptura del acuerdo pone fin a una serie de pactos que, desde 1996, permitieron a México exportar jitomates sin aranceles, bajo compromisos de precios mínimos y reducción de dumping. En total, se firmaron cinco acuerdos similares en los últimos 27 años.

El conflicto se remonta a 1996, cuando productores estadounidenses acusaron a México de vender jitomate por debajo del costo real, una práctica conocida como dumping. Ahora, tras casi tres décadas de negociaciones intermitentes, el tomate mexicano vuelve a enfrentar barreras comerciales al norte del Río Bravo.