BOGOTÁ.— Autoridades de Colombia afirmaron que presumen que los cuatro niños indígenas perdidos desde hace casi un mes en la Amazonía están vivos e insisten en buscarlos, dijo ayer el general Pedro Sánchez, el militar a cargo de la operación.

Los menores de 13, nueve y cuatro, además de un bebé de 11 meses, viajaban junto a su madre y otros dos adultos en una avioneta que cayó el 1 de mayo en la espesa selva del sureste del país.

A diferencia de los mayores de edad, sus cuerpos no estaban en la aeronave y rescatistas han encontrado sus pertenencias, un refugio improvisado y una fruta mordida en los alrededores.

Concluimos que los niños están vivos por las evidencias. Si estuvieran muertos, seguramente sería fácil encontrarlos porque estarían quietos, porque los animales nos orientarían para allá”, dijo a W Radio el general tras una reunión con los encargados de la Aeronáutica Civil y el estatal Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, encargado de velar por los derechos de menores de edad.

Las autoridades rastrean a los menores por la ribera del caudaloso rio Apaporis en un área de unos 323 kilómetros cuadrados, el equivalente a toda la provincia de Buenos Aires.

Sigue siendo muy extraño porque no se detienen a pesar de que hemos insertado más de diez mil volantes y 100 kits de supervivencia”, agregó el general a cargo de casi 200 hombres, entre indígenas y militares.

El presidente del país sudamericano, Gustavo Petro, informó que los niños habían sido hallados con vida el 17 de mayo, pero al día siguiente se retractó y lamentó la falsa información.

Según los familiares, la mayor de los hermanos del pueblo huitoto tiene gran habilidad para moverse por la selva.

El miércoles 24, las tropas encontraron dos pañales y un par de zapatillas en la zona.

En el área habitan jaguares, pumas, serpientes y otros depredadores.

También hay presencia de guerrilleros que se apartaron del pacto de paz firmado por las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC) en 2016.