Espíritu divino
Cuando llegue el momento de perder la noción del tiempo,
quisiera olvidar todo, menos los felices días que pasé contigo,
y que me digan demente, pues de amarte no me arrepiento,
no quiero perderte y no deseo que el olvidarte sea mi castigo.
Cuando llegue el momento, pregúntale a mi amigo el viento,
por qué te llevo en el corazón con mucho amor y buen abrigo,
ya no importará lo que fui o lo que haya sido en su momento,
porque sólo estarás tú en mi mente, sinceramente te lo digo.
Cuando llegue el momento y se vuelva confuso el pensamiento,
acércate y siente al tocarme, lo mucho que te amo y te bendigo,
sentirás que nuestro amor ha sido siempre un hermoso cuento
convertido en realidad, donde Dios fue el aval y el fiel testigo.
Cuando llegue el momento, toma mi mano para ir al encuentro
del Señor a la tierra prometida, porque el cielo lo conocí contigo
aquí en la bendita vida, donde hubo más alegría que lamento,
seamos la luz que ilumine al Espíritu de Dios a vencer al enemigo.
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