No todas las tristezas vienen del quebranto pasional, hay una en especial, que nos hace recordar, cuánto hemos dejado de amar a quien tanto nos ha amado, al que se ha entregado como Cordero Pascual, para salvar nuestro espíritu aprisionado por el egoísmo injusto y despiadado que nos hace tanto mal.
TRISTEZA ANCESTRAL
No sé qué pesa más, si la edad o la rutina,
si hay ancianos jóvenes y jóvenes ancianos,
que igual despiertan sin energía matutina,
al olvidarse de amar como todo buen cristiano.
Si pasaste la vida llevando una vida libertina,
o viviste para no pecar contra tu hermano,
llegarás igual desfalleciente a la otra esquina,
preguntándote si viviste lo que fue más sano.
¿Arrepentido por algo que a tu vida desafina?
Si vivir es un milagro para salir de lo profano,
pecar es prueba para que tu destino se defina,
si Dios es contigo, estarás con él en otro plano.
Quiero caminar al lado de Jesús en Palestina,
seguir su divina huella en el desierto y en el llano
y pedirle me dé a beber del agua pura y cristalina,
para que defina en mi ser, lo divino y lo humano.
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