La próxima semana será de las más intensas y cruciales en la vida política de Tamaulipas. Se acercan acontecimientos que marcarán un antes y un después en el equilibrio de poderes del estado, y que desde hoy deben estar ya listos en su planeación.
Este 30 de septiembre, los 147 juzgadores del Poder Judicial que ganaron en las elecciones del pasado 1 de junio rendirán protesta en el Polyforum de Ciudad Victoria, rompiendo con la tradición de hacerlo en el Congreso Local. El acto será público, abierto, con la presencia de los tres poderes del Estado. El propio gobernador lo calificó como un evento “muy significativo”, pues simboliza la fortaleza institucional que debe prevalecer en un sistema democrático.
Pero lo que debería ser un proceso planchadito no lo ha sido del todo. En menos de una semana, siete jueces y magistrados electos han renunciado a su cargo antes de asumirlo. El caso más reciente fue el de Jesús Terán Martínez, juez electo en materia laboral en Reynosa, quien declinó hace apenas unos días; ahora su lugar lo ocupará Juan Jesús Anaya Fernández.
Pero no es el único. Las renuncias se han repetido en Nuevo Laredo, Altamira, El Mante y Matamoros, lo que ha obligado a llamar a suplentes e incluso a segundas o terceras opciones, generando movimientos inesperados en el nuevo poder judicial.
Al mismo tiempo, hoy martes el Consejo de la Judicatura tendrá su última sesión, dando paso a la instalación del nuevo Tribunal de Disciplina Judicial, que a partir del 1 de octubre será responsable de vigilar y sancionar a los servidores públicos del Poder Judicial. Se trata de un rediseño institucional que busca mayor control y transparencia en el quehacer de jueces y magistrados.
Y por si esto fuera poco, apenas un día después de la toma de protesta del poder judicial, es decir, el 1 de octubre, el gobernador Américo Villarreal presentará su informe semestral en el Teatro Amalia G. de Castillo Ledón. Aunque constitucionalmente el informe debe rendirse en marzo, el mandatario ha optado por dar dos reportes al año, con la intención de que los tamaulipecos tengan una evaluación más frecuente de los avances durante su gobierno.
Después de esto, los reflectores estarán puestos en lo que muchos vaticinan, cambios en el gabinete estatal tras el informe. El secretario general de Gobierno ya adelantó que son ajustes naturales que pueden darse en cualquier momento, pero el contexto y los movimientos recientes parecen hacerlo inevitable.
Por cierto, este fin de semana, llegó el relevo en la oficina de asesoría del gobernador, luego de que Tania Contreras dejó el cargo para convertirse en la nueva presidenta del Poder Judicial. En su lugar fue designado Marco Antonio García Barrientos como consejero jurídico.
La trayectoria de García Barrientos, con experiencia en el sector privado y en dependencias estatales, ahora será clave para continuar la ruta que dejó Contreras, cuya función principal fue empujar las investigaciones contra el exgobernador panista, Cabeza de Vaca. El reto del nuevo consejero será mantener la línea de legalidad y transparencia en beneficio de los tamaulipecos.
Pendientes
Que Dios los bendiga, gracias. Leo sus comentarios en mis redes sociales.