Ooootra vez, la costosa batería de abogados que Cabeza de Vaca paga con dinero sustraído del tesoro público, consiguió otro demora en la modalidad de amparo contra una orden de aprehensión en su contra, pero más tarde que temprano, la ley le echará el guante al ex Gobernador.
Invocando preceptos leguleyos, los defensores de alta factura de Cabeza de Vaca doblegaron nuevamente la vara de la justicia, pero Francisco no se confía y permanece escondido en algún lugar del mundo, sin atreverse a dar la cara.
Los amigos y seguidores del panista en fuga no renuncian a su pretensión de tratar de hacerlo aparecer como una blanca palomita, en otra intentona de tapar el sol con un dedo.
Pero solo consiguen quedar en evidencia como obsecuentes, cómplices, tapaderas, pues Cabeza dejó un regadero de evidencias de su insaciable apetito de dinero ajeno, como lo demuestran las tras acusaciones federales que pesan en su contra.
Delincuencia organizada, defraudación fiscal equiparada y uso de recursos de procedencia ilícita, son los delitos que le enjareta a Francisco la justicia federal, que son diferentes a los delitos que le adjudica el gobierno tamaulipeco, por un monto de más de 500 millones de pesos.
El amparo que le consiguieron sus exclusivos y muy caros abogados no significa que Cabeza sea inocente, sino que recurren a tecnicismos y otros artilugios jurídicos para estorbar el debido proceso y ganar tiempo.
El juicio popular ya emitió sentencia en contra aunque Cabeza de Vaca nunca se ha preocupado por el repudio social pues lo suyo es escalar, siempre escalar, a costa de lo que sea.
La impopularidad del ex Gobernador está rebotando en el PAN, donde dos de sus más conspicuos militantes están enfrascados en una reyerta que exhibe una división que los empuja en caída libre.
El Cachorro Cantú Galván está siendo torpedeado por Arturo Soto Alemán, cuyas derrotas electorales consecutivas lo enceguecen y busca en quién desquitarse. Está insinuando que el presidente estatal del PAN hace uso indebido de la tesorería azul.
Los otros partidos no están mejor en nuestro Estado, evidenciando aquí la crisis del sistema de partidos políticos, con dirigencias minimizadas, empequeñecidas, sin relevancia ni trascendencia.
No pueden lanzar la primera piedra sobre la existencia del abstencionismo, la abulia ciudadana respecto de la cosa pública, la indiferencia de la sociedad frente al quehacer gubernamental.
Servidores públicos del tipo de Cabeza de Vaca hundieron en la podredumbre a la función gubernamental, provocando una repulsa generalizada que se refleja en la escasa concurrencia ciudadana en las urnas.
Afortunadamente, la sociedad está cada vez más avispada y no se deja sorprender tan fácilmente por estos gambusinos de la burocracia dorada.
En otros temas, el gobierno de Tampico, la iniciativa privada y representantes de la sociedad civil, iniciaron reuniones preparatorias de la fiesta del bicentenario de la ciudad, que tendrá su evento magno el 12 de abril.
El comité ciudadano del bicentenario de Tampico lo encabeza el presidente municipal Jesús Nader y allí están representados todos los sectores del puerto, aportando su colaboración para que la fiesta resulte histórica e inolvidable.
“Durante todo el año, Tampico vivirá una fiesta, una celebración digna del bicentenario, por lo que quiero agradecer y reconocer el interés de todos los sectores de la sociedad por involucrarse y formar parte de los eventos que desarrollaremos durante 2023”, dijo Nader.
A propósito de Tampico, el gerente general de la COMAPA el joven maestro Francisco González Casanova puso en marcha hace unas semanas un ambicioso programa de rehabilitación integral de la dependencia.
La COMAPA de Tampico y zona conurbada cambió en diciembre de titular y desde entonces se puso en marcha un proceso que busca conseguir que la dependencia deje de ser (como lo dijo López Obrador) un elefante echado, reumático, abandonado a su suerte.
En efecto, los anteriores funcionarios de la dependencia se echaron en la hamaca y se desentendieron de cumplir su responsabilidad, dejando que las instalaciones se deterioraran, cundiendo los caídos y permitiendo la mala calidad del agua distribuida.
Es una tarea de saneamiento que aceptaron emprender a pesar de que no hay presupuesto suficiente ni parque vehicular adecuado. Ojalá no desistan y se fajen como los buenos, en beneficio de los usuarios y de la sociedad en su conjunto.
Un buen augurio del buen desempeño de Francisco González Casanova en la COMAPA conurbada, es que tomó posesión en una ceremonia encabezada por el secretario general de gobierno Héctor Joel Villegas González y el gerente estatal del Agua, Raúl Quiroga Alvarez.
Correo electrónico: albertoguerra65@hotmail.com