He pensado mucho en que escribir sobre lo que ha pasado estos días en CDMX. Pensé en hacer dos artículos, lo bueno y lo malo, pero no se puede, los mexicanos somos una mezcla de colores que vamos del verde esperanza al rojo sangre, del blanco inocencia al negro violencia… quizás estas combinaciones reflejan la orgullosa ambivalencia de quienes somos, quizás por eso nos identificamos con el resultado de estas mezclas, quizás por eso el rosa mexicano.

De estos contrastantes días, sin lugar a duda me quedo con la frase de un voluntario; “Nos quedo chiquito el terremoto”. Y si, la frase lo dice todo, la sociedad en su conjunto supero 10 a 1 a la tragedia. Miles de imágenes y videos lo demuestran, la única forma de escribir sobre estos hechos es con la tinta de las lagrimas de todos los mexicanos que lloramos al ver los cuerpos exhaustos de los voluntarios, la voluntad de ayudar de todo un país que saturo los centros de acopio, el ver el rescate de una persona viva de los escombros. México se unió.

Vimos también un nuevo periodismo, que hace de cada ciudadano con celular un reportero. Vimos todo tipo de gente informando con objetividad y oportunidad lo que pasaba en cada rincón de la ciudad. Los mexicanos hicimos a un lado la radio, la televisión,los periódicos… dejamos de creerles, nos volcamos en las redes sociales para informarnos, solidarizarnos y volvernos editorialistas o mostrar nuestro descontento. Hay nuevos lenguajes, nuevos medios, una nueva forma de darle estructura a nuestra sociedad para informarse y manifestarse, para ayudar a hacer un mejor país.

¿Qué nos fallo?, nuevamente el gobierno. Un gobierno que no se identifica, que no responde, que no sabe actuar porque se ha dedicado mas a parecer que ser y hacer.

¿Quiénes nos fallaron?, los políticos, los que cenaban en Polanco esa misma noche, los que no estaban ayudando en los edificios colapsados, los que cobardemente ahora guardaron silencio, lo que se aferraban a su presupuesto hasta que la sociedad les arrebató lo que no era suyo.

¿Que sigue?. El nuevo México no es de caudillos, nadie tiene el poder por si solo para cambiarlo. Los mexicanos hemos demostrado que como sociedad solo necesitamos definir una meta, como en este caso fue ayudar a salvar vidas y fortalecer la esperanza.

¿Qué hacer?, Creo que en mi caso, como el de muchos mexicanos, es entender y definir cual es el nuevo frente. Sabiendo que tenemos un gobierno y “representantes” del pueblo que nos han traicionado. Alcaldes, secretarios, gobernadores, diputados, senadores y un presidente.

No se todavía en que México colapsado estaré ayudando, a que centro de acopio tendré que llevar mi voluntad.  Solo sé que no podemos permitir que esa union y fuerza que mostró México desaparezca, y que entendamos que los malos gobernantes han matado más gente y han hecho más daño que los terremotos de los “19 de septiembre’s”.

Intentando no perder la perspectiva, dirijo mi mirada al pasado de estos tres días y lo primero es dar gracias por Sofia y Diego que están bien. Hoy, me invade la pena por la tragedia, pero la misma convive con el orgullo de ser mexicano al ver la respuesta de la sociedad. Mañana , me queda el pendiente de que este México merece más que lo que tenemos, y tendremos que actuar, pronto.

#FuerzaMexico será mas que un grito de aliento en la tragedia, será el motivo de unión para cambiar a México.

Javier Potes