Al acabar con la Ley de Pensiones que se reformó en 1997 y creó las AFORES, para evitar pobreza en la vejez se debe ajustar edad de retiro, reducir oportunidad para sacar fondos en las Afores antes de la jubilación, y aglutinar todos los sistemas públicos de ahorro para el retiro en un solo sistema público integral en un Sistema de Seguridad Social a construir, señala Enrique Díaz-Infante, director del Sector Financiero y Seguridad Social del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY)

En el Grupo participan 8 organizaciones de la sociedad civil y 8 legisladores de partidos políticos, quienes elaboraron Reforma al Sistema Universal de Pensiones, el cual subraya la urgencia de atender el reto de la insostenibilidad financiera del sistema de pensiones, de la reducida cobertura y la baja tasa de remplazo. El texto recomienda a los legisladores reformar el sistema pensionario. Destaca que para aumentar la cobertura se debe introducir un esquema obligatorio para que empleados y autoempleados aporten para su retiro y puedan recibir el beneficio a la jubilación. Colaboran el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria del Coneval, el Instituto Mexicano para la Competitividad, de Oxfam, Fundar, de la Fundación Friedrich Ebert, del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP), de la Cepal, y de la Auditoría Superior de la Federación, entre otros.

Para una sociedad equitativa se debe dar cobertura de seguridad social a todos los mexicanos y eso cuesta, según se estimó hace 3 años, 2.4% del PIB, cifra. Se propone que se financie de IVA de 16% a alimentos y medicamentos. Entre las propuestas que han hecho está brindar pensión mínima para todos los mexicanos, independientemente si trabajan en la formalidad o informalidad, y complementar con pensión de la Afore, para quien la tuviera y también que todos tuvieran acceso al sistema de salud. Advirtió que se le acaba el espacio fiscal al gobierno federal y tiene que buscar fuentes de ingreso recurrentes pues no es posible financiar el gasto de pensiones con ingresos petroleros, por lo que deben definir de dónde obtendrán recursos.

El sistema de pensiones demanda $1.2 billones. La recaudación del IVA es para financiarlo y es gasto que se incrementa cada año, es vital sea sustentable. Así como vamos y con los cambios demográficos, es una bomba que estallará a corto plazo porque en materia de gasto social, lo que más se lleva son jubilaciones y pensiones, es el rubro que más crece desde 2009. El Grupo elaboró 5 documentos: requerimientos de gasto, de salud, de educación, del sistema de cuidados y la propuesta de crear el Instituto de Estudios para la Hacienda Pública. Los textos quedan como insumo de trabajo para la próxima legislatura. La prioridad es el sistema de salud, debe haber una revolución que eleve la cobertura efectiva, que garantice la gratuidad de los medicamentos, y atención en tercer nivel. Las carencias que se incrementaron a causa de la pandemia exigen esta revolución completa y la dotación de mayores recursos.