La sociedad y el comercio mundial se sustentan sobre billetes y monedas, pero los bancos en México carecen de decenas de miles en efectivo, evidencia de que plástico y transacciones son el presente de un futuro próximo. La transformación digital es causa en este cambio de visión. Antes tener la cartera llena de billetes era un orgullo, ahora es opción añeja sin futuro.
En Suecia 2% de los pagos se realiza con billetes y 98% es transacción digital, con 2030 como límite para efectivo en sus calles. De 2009 a 2015 redujo 106 mil millones de euros de papel moneda 8 mil millones, de los cuales 40% circula.
La mentalidad orientada al uso práctico y la comodidad, sin apego a la propiedad en sí misma del dinero tiene mucho que ver en este proceso que impulsó Suecia.
23% de los españoles paga sólo efectivo (la media de Europa es 10% y 7% paga sólo con tarjeta bancaria. En Brasil este porcentaje es 27%. En Europa, de los 46 mil billones de transacciones anuales, 85% se siguen realizando en efectivo. La adopción del dinero físico crece pese a medidas gubernamentales para reducir el flujo de billetes, como la recientemente de limitar a mil euros los pagos en mano o pese a que en México existan más tarjetas que personas (69 millones de plásticos, 45 millones de ellos de crédito.
La privacidad es el principal obstáculo a adoptar un mundo sin efectivo. Y es que, todo pago realizado se registra por lo que es posible seguir nuestro gasto dando pie a que se anticipe lo que queremos hacer y tomar medidas preventivas. Un tercero accede a esos datos con fines comerciales o promocionales y, adiós la intimidad en este universo. En contraparte, acabar con los billetes para reducir la corrupción, evasión fiscal, tráfico de drogas y la economía sumergida es una ventaja,
Philip Heasley, presidente de ACI Worldwide, compañía global líder en pagos electrónicos explica que en los próximos años el usuario entrará a un restaurante o almacén, disfrutar de la experiencia, comer y comprar, sin fila o pagar la cuenta. Teléfonos inteligentes, relojes, y carros tendrán microchips para transferencias automáticas.
Somos una compañía de pagos universales que administra transacción electrónica de 5,100 organizaciones en el mundo, protege cinco millones de tarjetas de crédito y débito mensuales con sistema antifraude especial. Procesa, más de mil millones de transacciones anuales y mueve 14 billones de dólares diarios en pagos y movimientos financieros.
Latinoamérica tiene poca infraestructura vieja pues no participó del crecimiento que tuvo lugar en el mundo en los últimos 20 años y puede adaptarse fácil a la infraestructura digital. Uber es un ejemplo, usted usa el servicio y no paga nada en efectivo, no hay dinero.
Nos movemos hacia un mundo sin pago y sin plástico. El presente es la transacción con el móvil; el café, el transporte, etc., cuestión de permitir la transacción desde todo dispositivo que la persona quiera usar para comprar. Entre muchas plataformas, Master Card dio paso a Master Pass, un gigante en este tipo de transacciones.

Se acaba el papel moneda
La sociedad y el comercio mundial se sustentan sobre billetes y monedas, pero los bancos en México carecen de decenas…