Durante el periodo de la pandemia del Covid-19 no únicamente se han registrado situaciones negativas, aunque las defunciones por esa causa han provocado dolor y desconcierto en las familias contagiadas que han tenido un final lamentable. Hay algunos rubros de la vida social como la vivienda donde las diversas formas de financiamiento han favorecido el incremento de créditos para adquirir una vivienda.

Un informe del Banco de México revela que al mes de agosto del 2021 se expidieron créditos que sumaron más de un billón de pesos, que representó un crecimiento de los créditos otorgados que se ubica por encima del 9 por ciento. Y en ese orden, la tendencia de ese sector, se mantienen a la alta.

El punto de referencia es el mes de abril del 2020, al inicio de la pandemia, y el banco mexicano señala que la cartera de crédito a la vivienda dentro del financiamiento es el único que ha mostrado de forma continua una variación anual con resultados positivos, en términos reales.

Los datos alegres del Banco de México corresponden con la percepción de la población, que en sus apreciaciones tradicionales al margen de análisis comparativos y demás considera que la actividad de los albañiles es un síntoma de que la economía es dinámica y productiva para el sector obrero lo mismo que para otros sectores de la economía.

En ese orden la percepción social muestra que los albañiles están activos lo mismo que otros sectores como el transporte de materiales propios de la obra que también muestra movilidad, al menos eso es lo que se observa en el contexto social, la cuestión se complica cuando las construcciones se frenan.

A nivel local, los legisladores locales de Morena, Movimiento Ciudadano y Revolucionario Institucional aprobaron revertir reformas promovidas por la anterior legislatura donde el Acción Nacional era mayoría absoluta, en ese orden hicieron reformas a la Ley de Hacienda para justificar más impuestos que afectan a profesionistas como los licenciados en derechos, que litigan en las fiscalías y los juzgados tamaulipecos.

El promovente de la iniciativa de decreto fue nada más y nada menos que el ex priísta metido de morenista Javier Villarreal Terán, el mismo que fue alcalde de Mante y legislador local por el partido tricolor. También fue secretario particular del ex gobernador Manuel Cavazos Lerma.

El contenido de la iniciativa está debidamente estructurada y fundamentada conforme a la legislación local, esto debido a que Villarreal Terán únicamente dio lectura a la propuesta de los abogados litigantes, principales interesados en revertir entre estas reformas impositivas de pago, también llamadas hacendarias, porque les pega en el bolsillo.

Pues resulta que la mayoría panista les impuso pagos a las víctimas y demandados por peritajes de carácter psicológico y exámenes materiales por 5 y 7 mil pesos. La misma reforma consideraba cobros por la expedición de cartas de antecedentes penales. Es decir, Irving Barrios quería que le timbre la caja de la democracia, en la fiscalía a su cargo.

En el rubro electorero rindieron protesta como consejeras Marcia Laura Garza Robles, Mayra Gisela Lugo Rodríguez y Eliseo García González, cobrarán en el Instituto Electoral de Tamaulipas, durante 7 años, por los que fueron nombrados por el Instituto Nacional Electoral. La primera de estas dio el salto de magistrada del Tribunal Electoral al organismo que organizará la elección del próximo gobernador.

El financiamiento otorgado por los bancos para la adquisición de vivienda, hasta el mes de agosto reportó un saldo de un billón 40 mil 228 millones de pesos, lo que representó un aumento de 9.3 por ciento respecto del mismo del año previo, revelan las últimas cifras del Banco de México (BdeM).

Se trata del único segmento del crédito que ha crecido desde inicios de la pandemia, por lo que lleva 16 meses consecutivos al alza, y justo en el octavo mes del año alcanzó su saldo más alto desde que se tienen registros por parte del regulador.

Según los datos del banco central, si se toma en cuenta el saldo del crédito que se tenía en abril de 2020, mes en el que se inició la pandemia –922 mil 419 millones de pesos–, al mes de referencia existe un aumento de 12.7 por ciento en el crédito vigente.

En su comparativa mensual, es decir, agosto con respecto a julio, hay un incremento de 0.7 por ciento en el saldo del portafolio vigente.

“La cartera de crédito a la vivienda es la única dentro del financiamiento que ha mostrado de manera continua una variación anual positiva desde el inicio de la pandemia, tanto en términos nominales como reales.

Asimismo, desde mayo de 2021, suritmo de expansión se ha acelerado, al pasar de un crecimiento real de 2.5 por ciento en abril a una variación de 3.6 por ciento en agosto de 2021, más de un punto porcentual de diferencia”, explicó BBVA.

En un análisis, la institución financiera explicó que la aceleración en el crecimiento del crédito se debe, sobre todo, al aumento en los saldos asociados al segmento de vi-vienda media y residencial, que re-presenta 95.2 por ciento de la carte-ra hipotecaria total y que ha aumen-tado su dinamismo desde marzo de 2021, con un alza anual real de 5 por ciento en el mes de agosto.

Según el banco central, al mes de agosto el saldo vigente para las hipotecas del sector medio y residencial ascendió a 990 mil 35 millones de pesos, lo que representó un incremento de 10.8 por ciento con respecto al mismo mes de 2020.

En tanto, al compararse con abril del año previo, al inicio de la pandemia, existe un aumento de 14.8 por ciento. Cabe mencionar que el saldo al mes de agosto es la cifra más alta desde que se tienen registros.

Los resultados se dan en un momento en el que las instituciones bancarias llevan varios meses con tasas de interés históricamente bajas para que las personas adquieran una hipoteca, que rondan un promedio de 7.5 a 10 por ciento.

La rigidez al alza de las tasas hipotecarias como resultado de la competencia entre oferentes de crédito a la vivienda, podría mitigar parcialmente el efecto de las mayores tasas de interés. Adicionalmente, si la inflación se mantiene en niveles elevados por un periodo prolongado, que puedan afectar el poder adquisitivo de los hogares, el menor ingreso real podría impactar a la demanda por crédito a la vivienda, implicando una desaceleración más notoria en el crecimiento en los saldos de esta cartera, expuso BBVA.