– ‘De malas’, alcaldesa de Reynosa

– No cuenta con Cabildo ni Consejo

– Nadbank ‘destapa’ otra corruptela

– Diputados del PAN; el apachurrón

No hace mucho, comentamos en este espacio el grave predicamento en que se encontraría la alcaldesa panista de Reynosa, MAKI ORTIZ DOMÍNGUEZ, respecto a una serie de Observaciones que hizo a su gestión la Auditoría Superior del Estado.

Entre otras, las que se relacionan con la Cuenta Pública de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado local, correspondiente al período del 1 de octubre al 31 de diciembre.

Según la ASE, se detectaron irregularidades en el manejo de recursos públicos de dicha Dependencia, por el orden de 122 millones 861 mil 903 pesos.

Manejos que se atribuyen al entonces Encargado de Despacho de la COMAPA, JUAN GARCÍA GUERRERO y la responsable del área de Finanzas, ANA CRISTINA ZAPATA HERNÁNDEZ, según lo señala un documento de la ASE, del que aportamos detalle anteriormente:

“De la revisión realizada a la contabilidad y documentación comprobatoria de pólizas de egresos, cheques y diario se detectó que a partir del 1 de octubre y hasta el 31 de diciembre de 2016, el ejercicio del gasto fue autorizado y gestionado por el C. Juan García Guerrero y la C. Ana Cristina Zapata Hernández, con nombramiento de Encargado de la Gerencia General de la COMAPA de Reynosa y Encargado del Despacho de la Gerencia Financiera de la COMAPA Reynosa, respectivamente”, precisa el documento.

Pero el problema para la alcaldesa no termina ahí.

Según trascendió, durante la Sesión del Consejo de COMAPA efectuada el pasado lunes 4 de diciembre, el Director General de la Comisión Estatal de Agua de Tamaulipas (CEAT) LUIS PINTO COVARRUBIAS, hizo estallar otra ‘bomba’.

Es decir, que el Titular de la CEAT hizo del conocimiento de la alcaldesa MAKI ORTIZ, de una resolución del Nadbank, misma que revoca la autorización de una Obra del Cárcamo 278, cuyo monto supera los dos millones de dólares.

El problema es que dicha Obra ya está en ejecución, y se la habría auto-asignado JUAN GARCÍA GUERRERO, presuntamente, utilizando un prestanombres. Ya abundaremos en detalles al respecto.

Otro de los Temas que abordó el Director de la CEAT con la alcaldesa, fue el relacionado con la adquisición de dos equipos Vactor, en base a especificaciones de la Comisión Nacional del Agua, enfocadas en las necesidades actuales de Reynosa.

El hecho es que la alcaldesa se adelantó, y por su cuenta había ‘apalabrado’ ya la compra de dos equipos Vactor de 10 yardas. Dícese que ya los compró, y los tiene ‘clavados’.

La cuestión es que los equipos recomendados de la CEAT y la CNA, son de 15 yardas, toda vez que los de menor rango no servirían para desazolvar los colectores o subcolectores, como lo requiere urgentemente la Ciudad. (Los de 10 son para uso domiciliario).

Fue precisamente el Tema los equipos Vactor lo que detonó una nueva crisis en el Cabildo de Reynosa, ya que la alcaldesa pretendía sesionar a fin de obtener el aval de los Síndicos y Regidores para comprar sus equipos de 10 yardas… y se llevó la tremenda sorpresa, de que 13 integrantes de ese cuerpo edilicio no atendieron la convocatoria, y el quórum se fue ‘al agua’.

Vaya situación de la alcaldesa de Reynosa, no cuenta con mayoría en el Consejo de la COMAPA, y tampoco en el Cabildo.

Tal vez la terquedad de la alcaldesa MAKI ORTIZ en comprar los Vactor de 10 yardas, se deba a que el ‘operador’ de la misma fue CÉSAR BAHENA MOLINA, esposo de su segunda Síndico, ZITA DEL CARMEN GUADARRAMA, y no quiere dejarlo ‘colgado’.

Cabe recordar que en el arranque de la administración de Maki, Bahena Molina fue designado Director de Recursos Humanos, cargo del cual fue removido, por tener en su haber una inhabilitación.

De veras que la trae ‘de malas’ la alcaldesa. Ya les platicaremos del ‘apachurrón’ que le dieron los cuatro diputados locales panistas de Reynosa: ANA LIDIA LUÉVANOS, JUANITA SÁNCHEZ, JESÚS MA. MORENO IBARRA y ÁNGEL GARZA, en plena sede del Ayuntamiento. Tipo, “si no puedes, hazte a un lado”.

CONTRAFUEGO: Y su propuesta, por el caño.

Hasta la próxima.