Dos personajes claves, en la vida política, social y empresarial de Tamaulipas, señalaron con índice flamígero al Gobierno de FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA.
Uno, recientemente, fue JESÚS LAVÍN VERÁSTEGUI, coordinador del Comité de Enlace del equipo de transición de Gobierno entrante. El otro fue, MARIO FLORES PEDRAZA, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Ciudad Victoria.
Apenas el lunes 19 del presente, LAVÍN VERÁSTEGUI había denunciado que la deuda pública que le dejará GARCÍA CABEZA DE VACA al doctor AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, “ha crecido de forma escandalosa”.
Días antes, un seis de septiembre, MARIO FLORES PEDRAZA, fue más específico, al denunciar que la deuda que dejará con proveedores el Gobierno de GARCÍA CABEZA DE VACA, va desde los dos mil hasta los seis mil millones de pesos; aunque no especificó si sólo de los afiliados a la Coparmex.
En esa ocasión el Líder de los patrones capitalinos citó: “La deuda a proveedores quedó enorme, más grande que en cualquier otro sexenio” … ¡Ay nanita!
FLORES PEDRAZA es un hombre de fe, por lo que mencionó en esa ocasión que: “Esperemos que el Gobierno entrante pueda cumplir con las proveedurías de obras, servicios, bienes, que se han hecho en estos seis años que han quedado ahí, facturas por pagar”.
Pero, hablando en plata limpia, por mucha fe de FLORES PEDRAZA, nadie en su sano juicio quiere hacerse cargo de deudas que no les corresponde y hay quienes ni de las propias deudas se quieren hacer cargo… ¡Upsss!
Hacemos un paréntesis para señalar que la deuda que EGIDIO TORRE le heredó a CABEZA DE VACA fue cercana a los 14 mil millones de pesos y, la que CABEZA DE VACA le dejaría a VILLARREAL ANAYA, sería cerca a los 17 mil millones de pesos… cerramos paréntesis.
Precisamente, el seis de septiembre, FLORES PEDRAZA había señalado que había empresas que “facturaban aire”, es decir las llamadas “factureras”.
Aunque vale decir que en el caso de las “factureras” esas nunca tendrán problemas para cobrar, porque fueron creadas para sustraer recursos rápidos; es decir que no fueron creadas para generar pasivos.
En donde tendrán problemas las llamadas “factureras”, será cuando ingrese el nuevo Gobierno y sean investigadas bajo la sospecha de que fueron creadas sólo para sangrar las arcas estatales… ¡Ufff!
Por otro lado, hay que dejar en claro que en el cambio de sexenio los altos mandos, y los no tan altos, se van; es decir que buena parte de los trabajadores se queda.
En ese sentido hay mucho nerviosismo de que, aunque el futuro gobierno de AMÉRICO VILLARREAL iría tras la “cabeza” de quien será su antecesor, en esa misión se pueda llevar “entre las patas” a gente de “bajo perfil” que se vieron en la necesidad de “hacerle caso al Jefe” para no perder su chamba.
No hay duda de que habrá una persecución sobre quienes la hicieron, pero también se pudiera caer en los excesos de una “cacería de brujas”, si quienes causaron los presuntos desfalcos hicieron muy bien la “sustracción”, que lo “taparon” muy bien pues, que sería imposible rastrearlos.
Aquí vale comentar que HÉCTOR JOEL “El Calabazo” VILLEGAS GONZÁLEZ ya advirtió que van contra quien apuntala el actual Gobierno, pero, en palabras llanas, si en el camino de las “chapuzas” no llegan “hasta mero” arriba, tendrían que conformarse con pescar “charalitos” en lugar de peces gordos; ¿o no…?
Es precisamente allí, en esa posible pesca en busca de “peces gordos” que los “charalitos” que fueron obligados a seguir órdenes, sean los que paguen por los jefes… ¡Ay nanita!
Además, no hay que perder de vista que mientras esté JORGE ESPINO ASCANIOcomo auditor superior del Estado, todo será encuadrado para que no haya “problemas”, para los “peces gordos”, dejando pequeños bocados en forma de “charalitos” para que se alimente el escándalo mediático y pa’l baile vamos…
Para finalizar, y hablando de crisis, ruinas y olvidos: Vale comentar que, en algunas áreas deportivas del Gobierno del Estado, como las albercas del llamado “Planetario” y el “Polideportivo”, priva la tristeza pues desde que inició la pandemia (2019) los recursos fueron muy “light”.
Las escuelas de natación y triatlón, fueron las más afectadas por el “olvido” de dar mantenimiento a las albercas, pues las instalaciones ya no eran muy “salubres” que digamos y quienes pagaban para recibir instrucción simplemente se alejaron.
Los recursos programados y hasta “etiquetados” para las actividades deportivas y hasta para sueldos, de forma mágica desaparecieron y ello generó un panorama desolador.
Repito, basta con ver el agua de las albercas para “darse color” de que tienen meses sin darles un correcto mantenimiento y aunque los administradores claman por apoyo, tienen buen tiempo que no son escuchados.
Apenas estamos hablando de algo muy minúsculo como un par de albercas, por lo que deja abierto el “sospechosismo” de: ¿qué encontrarán en otras áreas como Salud, Seguridad Pública, Bienestar o Educación…? ¡Ufff!
La pregunta obligada es: ¿Quién de los ‘vientos del cambio’ iría a la cárcel? Los administradores, los directores, los subsecretarios, algún secretario o… llegarán hasta mero arriba: a la “cabeza” o sólo será puro show mediático… Pendientes…
GRACIAS… Nos leemos hasta mañana
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