Por todo lo que falta por ver, vale la pena luchar, por todo lo que falta escuchar, vale la pena esperar, por todo lo que falta disfrutar, vale la pena vivir. Pero quiero ver aquello que me haga sentir, que mi lucha tendrá un glorioso porvenir, que lo que vaya a escuchar, pueda

armoniosamente transportarme a un maravilloso viaje de placer sin igual, para disfrutar a plenitud todo lo que me ha faltado vivir. Porque la vida no es sólo soñar, estoy convencido que nuestro Creador, ha puesto a nuestra disposición tierra, cielo y mar, sólo tenemos que reconocer, que todo aquello que nos ha impedido gozar de lo que Él llamó en paraíso, sigue estando ahí, esperando a que nuestro mortal egoísmo nos deje de fastidiar y con ello veamos con claridad, lo que nos oculta la verdad.

Rendirse ahora, no es la solución, todo lo que nos hace sufrir y nos causa dolor, tendrá que parar, todo lo que nos arrebata la esperanza, se habrá de marchar, todo lo que nos hace ir tan de prisa y no nos permite tomar el aliento para descansar, tendrá que respetar la voluntad de nuestro Señor, que quiere lo mejor para la humanidad.

Dejemos de movernos en dirección contraria al amor, si lo que te falta por ver, es el poder de Dios para que puedas cambiar, Él te lo hará sentir en el momento en que te decidas a amar, en el momento, que en que estés dispuesto a escuchar a su hijo amado Jesús, en cuanto dejes en libertad a tu espíritu cautivo condenado por los actos de maldad.

No, no me dejaré derrotar por la nocividad de todo pensamiento o acto propio o extraño, que me quiera obligar a servirle a otro dios que me quiera alejar de Aquél que me ha dado a beber agua viva.

Correo electrónico: enfoque_sbc@hotmail.com