El metro de Nueva York, de acuerdo con Bloomberg, recibirá en 5 años inversión de 43 billones de dólares, (740 mil millones de pesos), 150 mil millones de pesos por año, para poner al metro neoyorquino en las mejores condiciones posibles.
Es un proyecto de obra mayor que incluye mejoras en el sistema de señalización y comunicación; remplazo de trenes, vías, elevadores, escaleras, y de sistemas para evitar inundaciones por lluvias. Se rehabilitará la Penn Station y cambiará parte de la estructura de Estación Central de 110 años en operación.
Ya inició el cambio de trenes por nuevos que permiten el paso de un vagón a otro, accesibles para personas con discapacidad. La inversión será financiada en parte por ingresos que se generen por el nuevo impuesto que se impondrá a vehículos de motor que circulen por Manhattan, al sur del Parque Central, modalidad ecológica.
Tránsito de Nueva York va a emitir deuda con base a los ingresos que va a generar el impuesto a la congestión de vehículos, por 15 billones de dólares, de los 43 necesarios, para iniciar la obra de mantenimiento, lo que permitirá que el gravamen sea mejor aceptado, en parte porque los ingresos se van a invertir para ofrecer mejor alternativa al uso del auto pues el programa de remodelación establece metas para reducir retrasos e incrementar la velocidad del metro y la comodidad.
Tiene sentido esta medida, con efectos inmediatos, financiados por ingresos futuros del impuesto a la congestión, que destinar cantidades que obtengan cada año para pagar por remodelaciones menores. Las emisiones se van a reducir por el menor uso del auto desincentivado por el impuesto y las personas van a utilizar un Metro más confiable, rápido y seguro. La mega remodelación marca el camino de cómo se mejora de manera integral un servicio de esa magnitud sin utilizar solamente la tarifa que se paga por el mismo, sino de gravar a quienes emiten contaminantes.
La empresa Det Norske Veritas, en su tercer peritaje del colapso de la Línea 12 del Metro Capitalino, señaló que una de las causas fue falta de mantenimiento. Aun así, al tercer trimestre 2022 “el gasto en Herramientas, Refacciones y Accesorios Menores fue $201 millones, 59% inferior al mismo periodo 2021 y peor desde 2017.
Redujeron gastos en instalación, reparación, mantenimiento y conservación 10% en comparación con 2017. Para 2022 fue 16% más grande que en 2021. Para 2023 es de $18.8 mil millones, 16% más grande a 2021, inferior al pagado en 2016, su mejor registro. Peor aún, es 5% inferior al presupuesto de 2022 y 17% menor al de 2018, antes de la entrada de Claudia Sheinbaum al gobierno de la CDMX.
Mientras en Nueva York la descentralización permite frentes de inversión, en México el retorno a la centralización cierra las puertas a maniobras regionales y locales. Vea el pésimo estado que guardan los hospitales castigados por IMSS Bienestar.