Siempre es bueno tener muchos nietos, porque cuando los hijos se van, nos envían a sus representantes a cubrir el hueco que dejaron en nuestro hogar, y conforme crecen los primeros, entran en acción los más chicos.

Soy amante de la paz y la tranquilidad, y si bien es cierto que en ocasiones requiero de estar únicamente con mi esposa, es prudente platicar con ella para saber si ella tiene los mismos deseos de estar conmigo, porque a decir verdad, es más reconfortante estar con los nietos, porque gracias a su dinamismo, su inquietud y sus deseos de aprender, no le permiten a su cuidador estar pensando en sí mismo.

Esta observación me ha dado la oportunidad de concederles un efecto analgésico, ansiolítico y relajante en beneficio de los abuelos, pero como todo en la vida, habrá de dosificarse con precisión, y también de tenerse en consideración el carácter de estos, porque influye en demasía, en la planeación y el desarrollo de las actividades, donde se buscará el disfrute compartido.

En nuestro caso, nuestros nietos tienen la oportunidad de experimentar emociones diversas, por ejemplo, el carácter obsesivo compulsivo de mi esposa, los invita a realizar tareas muy organizadas y a utilizar materiales específicos para cada actividad, de mi parte nuestros nietos tienen la oportunidad de desarrollar la imaginación y con ello crear escenarios diversos, que de ser de inicio fantásticos, aterrizan en una realidad que requiere soluciones congruentes.

Por otro lado, nuestros nietos hacen que mi esposa se olvide por un momento del preciso orden que deben de guardar las cosas en el hogar y la impecable forma del arreglo personal, y a mí me dan la oportunidad de tener acceso a un valioso material para elaborar mis artículos, y también de terminar de complacer a mi yo niño por aquello que en su momento no pudo realizar.

En conclusión, convivir con los nietos es terapéutico y quien no lo ve de esta manera, seguramente encontrará la misma dificultad para encontrar satisfacción en otros tantos métodos para allegarse una buena salud física, mental y espiritual.

enfoque_sbc@hotmail.com