Quino, el genial caricaturista argentino, contumaz crítico sociopolítico y creador de la adorada Mafalda y amigos, deja en uno de sus cartones de la época una conclusión lapidaria sobre las consecuencias de lo que podríamos llamar “ponerse de acuerdo”.
La presento, si me permite.
El padre de Mafalda, riéndose, le dice a ésta que recuerda cuando Mao Tsé Tung afirmó que si los 700 millones de chinos –ahora son mil 386 millones– se ponían de acuerdo y daban al mismo tiempo una patada en el suelo, el resto del mundo iba a pasarla mal.
¿No es gracioso?, le pregunta a la pequeña, quien sin contestar sólo lo mira con ojos de miedo. “No, no es gracioso”, piensa el papá, alejándose de la precoz niña.
Viene a colación este pasaje por lo que está pasando en el entorno político y gubernamental mexicano. Me refiero a la rebelión ya nacional de la corriente panista contra el sistema federal, que hasta hace poco aparecía sólo en los discursos y ahora ya lo hace en los hechos.
En otras palabras, ya se pusieron de acuerdo.
Le expongo mi opinión en una frase: Quien pretenda menospreciar el rechazo de nueve gobernadores emanados de Acción Nacional y de cientos de alcaldes del mismo establo a las recomendaciones de la nueva estructura de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, no sabe lo que está haciendo.
La verdad es que la CNDH, aprovechando el apellido de su señora presidente tan cuestionada, es sólo la piedra sobre la que se está edificando, si no se atiende, la mayor rebelión y pariente cercana de una insurrección, contra el federalismo.
En realidad Rosario es una pieza menor en su rango de influencia, pero adquiere una relevancia enorme si se toma como primera pica de la ruptura azul con una institución de perfil nacional.
¿Cuál institución sigue en esa dinámica de ruptura?
¿El INE?… ¿La Comisión de Energía?… ¿Quizás hasta el Poder Legislativo? Total, parodiando a Quino, los panistas ya se pusieron de acuerdo para dar al mismo tiempo una patada en el suelo y hacer que el resto de México la pase mal.
Llámeme catastrofista o agorero del desastre, tal vez me lo merezca y estoy elucubrando una mafufada, pero no creo dar golpes al viento al señalar que estas señales me parecen ominosas para la unidad tan necesaria que requiere México, hoy tan quebrantada por discursos de odio y separatismo entre “los que están conmigo” y “los que están contra mí”, sólo por no pensar igual.
Vienen tiempos más difíciles, Tiempos de borrasca.
Por el bien suyo, de nuestros hijos, de todos, ojalá que esas tormentas no terminen en lo que por naturaleza incluyen: en violencia…
EL CONTRALOR INCÓMODO
Se fue Mario Soria Landero de la Contraloría del Gobierno de Tamaulipas.
En mi percepción, es lamentable.
Soria era uno de los poquísimos funcionarios de primer nivel en la administración tamaulipeca que ejercía la autocrítica sobre el tinglado gubernamental y señalaba sin reparos las fallas en que incurrían sus próceres.
Así, todo indica que se convirtió en un Contralor incómodo.
No conozco a la nueva titular como nunca conocí personalmente al ahora ex titular, Mario Soria.
Habrá que darle el beneficio de la duda y esperar a que dé resultados no sólo en anuncios, discursos y programas de relumbrón, pero insisto: la estructura del gobierno estatal dejó ir a un servidor al cual no puedo calificar de ejemplar, pero que por lo menos procuró cumplir con su encomienda. Buena suerte…

LA FRASE DE HOY
“Las personas que debemos temer no son las que no están de acuerdo con nosotros. Debemos temer a las que no están de acuerdo y son demasiado cobardes para darlo a entender”
Napoleón Bonaparte

Tweeter; @LABERINTOS_HOY