Si los ciudadanos que cada día requieren de combustibles fósiles, como son el diésel o gasolina, para mover sus empresas de cualquier naturaleza, giro o sector lo mismo que a sus familias, están considerando que la liberalización de los precios de los combustibles, podrían disminuir.
Esa no es la finalidad de diferentes instancias del Gobierno Federal y la iniciativa privada que convergen en esa tarea. Por ese motivo se ha optado por definir esas acciones como la flexibilización de los mercados de la gasolina y el diésel, en este caso para la zona noreste del país, en la que están comprendidos los estados de Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Durango y Tamaulipas A eso respondió la presencia de Guillermo García Alcocer, titular de la Comisión Nacional de Energía, quien acompañado de su similar en la Entidad de la Comisión de Energía de Tamaulipas, Justo Clynes, acompañado de otros funcionarios, explicaron a la prensa local que la región integrada por cuatro estados, y la ciudad de Gómez Palacios, forman parte de la etapa número dos, donde serán liberados los precios de los combustibles.
La principal novedad que presentaron durante una rueda de prensa en esta capital, es que el comportamiento de la Etapa Uno, que se aplicó en los estados de Baja California y Sonora, revela que con la liberación del precio de los principales combustibles que se utilizan en este país no se incrementaron los precios y habría más posibilidades de competir en ese mercado.
Los estímulos fiscales que concede el Gobierno Federal para los empresarios gasolineros de la franja fronteriza, se mantienen aún con la liberación de los precios de los combustibles. Lo que es menester entender, es que estas son prácticas que forman parte del neoliberalismo económico que rigen en el mundo de los países desarrollados y que necesariamente arrastra a los países en desarrollo como es el caso de la mayoría de los países de América, pero donde predomina los principios del capitalismo, que predomina en este territorio del universo.
El motivo de fondo podría ser también un ejercicio más de un Gobierno Federal en camino a desobligarse de la aplicación de subsidios a los combustibles, como lo ha hecho con otros artículos de la canasta básica, como los granos, la leche, el azúcar y otros conceptos que forman parte de la canasta básica. Lo que se advierte es que, como la empresa de las tortillas, sólo podrán sobrevivir en ese mercado quienes tengan capital mayor.
Pero también no hay descartar la circunstancia que enfrenta la paraestatal Petróleos Mexicanos, que desde hace décadas entró en un proceso que pareciera de liquidación, por ausencia de materia prima y turbios manejos que ha la han llevado a la quiebra. En otro orden, el gobernador tamaulipeco, Francisco García Cabeza de Vaca, instaló en la Ciudad de México el Consejo Consultivo de Seguridad Ciudadana, en el que participan especialistas en materia de seguridad, así como intelectuales, académicos, escritores e investigadores.
Definitivamente que se trata de una acción que deberían replicar los ediles en los 43 municipios tamaulipecos, ya que la estrategia de seguridad no sólo se puede desarrollar con cartuchos y fusiles, tanquetas y metrallas, sino también con literatura, pero sobre todo con la visión renovada de la academia, la investigación y la letra, sin hacer un lado la experiencia, porque ésta no se improvisa.