La Banca necesita colocar en el mercado el dinero que recibe por ahorradores o por inversores de gobierno o privados. Unos buscan ganancia a través del pago de interés, otras inversiones tienen destino específico; financiamiento a vivienda, empresas, agropecuario, etc. El negocio de la Banca es ser eficiente en colocar dinero. No arriesga su dinero; recibe dinero de terceras personas, lo presta a terceras personas, y se embolsa la mayor parte de la ganancia de este proceso. La Banca urgida de colocar dinero promociona tarjetas de crédito, compras a meses sin interese, crédito en efectivo a cuenta de la línea de crédito de la tarjeta, sin comisión, ni IVA y con tasa de interés súper (1.6% mensual) dado el mercado altísimo de tasas que se aplica en México. Por complicidad, el Estado Mexicano alienta a los mexicanos a hipotecar el salario de hasta 24 meses al comprar sin intereses, además de entregar las riquezas del país a extranjeros que explotan a placer y conveniencia minas y petróleo.
En México el proceso que realiza la Banca deja ganancia exorbitante, mayor que en cualquier otro país, pues la Comisión Nacional Bancaria permite a la Banca excesos al aplicar altas tasas de interés, amén de autorizar cobros (Comisiones) por procesos diversos que la Banca en otros países realiza sin costo al usuario.
La Banca tiene competidores autorizados por el Estado Mexicano. Las cadenas de almacenes que venden a crédito con intereses superiores al 100% anual, delito de usura que se lleva a cabo sin que autoridad alguna intervenga en defensa del consumidor, además de cobrar de manera intimidante. Otros competidores son las casas de préstamo que libremente operan con altas tasas de interés y realizan de manera abierta su promoción también con usura, en las oficinas de jubilados y pensionados en el país sin problema legal. Y, aún hay más; por Internet ofrecen préstamos y hasta limpiar el nombre del buró de crédito.
Un gasto inesperado, una oferta que satisface ese capricho, un desperfecto que requiere ser corregido prácticamente de inmediato, la Internet ofrece una variedad de casas de préstamo, sin embargo hay que investigar para elegir la que más convenga dada la necesidad de obtener efectivo, ajustar a las casas de préstamo a nuestra necesidad, moverlas de su parámetro diabólico de ganancia. Para ello debemos saber cuál pone menos trabas, cuál cobra intereses más bajos, cuál es el término de devolución del dinero solicitado y cuál es la compañía prestamista que otorga mayor confianza.
El mundo de Internet es distinto al mundo físico. Será dimensión astral; dimensión como en la que se dice está el alma, quien lo sabe, pero existe y opera miles de millones de pesos por día, sólo se requiere ser mayor de edad, tener credencial de elector, número de cuenta bancaria, dirección de correo electrónico, numero de celular, pues estos dos últimos reciben las notificaciones de gestión. Obtener crédito personales es fácil. Internet lo otorga a miles de millones de personas a las cuales la Banca se los niega, especialmente si por alguna razón está en buró de crédito con algún adeudo o retraso mayor en sus pagos contraídos, aunque no hay ley que obligue a las compañías a acudir al buró de crédito cuando se solicita un préstamo, por lo que un ejecutivo bancario puede autorizar tarjeta de crédito o línea de crédito, se esté o no en el buzón, cuestión de presentar ingresos y obligaciones y de encontrar personas en la Banca que valoren el nuevo estatus de quien solicita una línea de crédito en las formas que la Banca ofrece. Internet es ahora el nuevo mundo; con empresas que mueven miles de millones de pesos vendiendo productos y servicios y ahora solucionando adeudos pendientes y otorgando préstamos. El internet es una herramienta aun en desarrollo, junto con las computadoras se regirá el mundo. El dinero como tal cada año circula menos; el circulante electrónico aumenta cada año. Las aplicaciones son infinitas junto con la robótica.
PD: Enygma, película histórica muy valiosa, demuestra que los extra terrestres no actúan, viven, resguardan o vigilan; conducen a los seres humanos revelándoles conocimientos, herramientas y artefactos. El ser humano es un prodigio y utiliza sus inventos según los valores que en el interior de los líderes les impulsa a actuar, para bien y para mal.