Aunque la autoridad presenta escenarios que habría sido construidos para evitar que la población mexicana caída en la desesperación, la preocupación de los obreros y trabajadores desempleados que son millones se mantiene en la inseguridad alimentaria, es decir en un sector de la población hay el temor de que se agoten los alimentos, esto se identificó en las familias donde hubo perdida de empleo del jefe de familia.
Según una encuesta del Instituto Nacional de Salud Pública, revela que al menos el 37.9 por ciento del estudio un integrante de la familia tuvo una perdida del empleo y en la mayoría se trata del jefe de la casa.
Asimismo la inseguridad alimentaria considerada entre moderada y severa se ubica en el 13.2 por ciento de las personas que participaron en el estudio de referencia. Y según el ejercicio el 73 por ciento reveló que sus ingresos económicos disminuyeron entre marzo y julio del 2020.
También se reflejo que la inactividad fue otros de los factores identificados que afecta en a personas económicamente activas con edad entre los 20 y 29 años de edad, lo que complementa la merma de los ingresos que llegaban a las familias antes de la pandemia, en una población que representa la fuerza laboral.
La referente desde cualquier punto de vista es y será la enfermedad y el comportamiento de esta. Que en produce temor a los confinados, lo no confinados, quienes enfrentan el fenómeno en primera línea, así como el miedo a que se incrementen los contagios, como ya ha ocurrido en algunas regiones.
Uno de los temores principales de la población es que no haya suficiente comida, en caso de que haya crisis sobre crisis y en forma de eslabón se agudice no solo el problema económico sino también el de los contagios, como ya ocurre en los sistemas de salud, que hasta el domingo anterior reportaron un 70 por ciento de ocupación hospitalaria sin ventiladores, que oxigenen la sangre de los pacientes.
El estudio indica que los temores de la población se imponen sobre las esperanzas de transitar durante la pandemia, quizá debido a la complicación con otras enfermedades y padecimientos. Lo cual se percibe en el comercio organizado, pues para estas fechas las luces y colores ocupaban en años anteriores los comercios informales y organizados, para estas fechas en las agencias de automóviles exhibían los nuevos modelos con moño radiante sobre el cofre de las unidades. El caso es que no ha podido vender los modelos 2020.
Por otra parte en el rubro de la academia, el Doctor Colombiano Mario Vargas Sáenz, subrayó la importancia de conectar el desarrollo local con lo que se está viviendo con el Covid y subrayó que las problemáticas que aceleraron las crisis, requieren de convocar a transformaciones para adaptarse a nuevas realidades.
Explicó los efectos del Covid como una oportunidad para reafirmar la centralidad de los Derechos Humanos de las personas migrantes en el desarrollo sostenible y habló sobre las vulnerabilidades presentes a lo largo del ciclo migratorio. Lo anterior en el marco del seminario internacional, denominado Universitarios para Trascender, promovido por la Universidad Autónoma de Tamaulipas.