El proceso educacional tiene como objetivo preparar ciudadanos capaces profesional, social, familiar y personalmente para desarrollo de la sociedad. La sociedad es responsable de exigir la formación que la propia sociedad requiere para su desarrollo. La educación no puede estar al vaivén de gobiernos que cambian periódicamente, cada uno con ideas y actuares, cambios de políticas, personal y de procedimientos, sólo por provenir de un gobierno diferente.
El país debe definir los requerimientos para cada campo profesional y técnico acorde a la necesidad de sus habitantes y participar. Gremios profesionales, sociedad civil, iglesia, grupos culturales, quien tenga impacto en la sociedad debe participar, sólo así solucionaremos todas las necesidades y formaremos los ciudadanos que necesitamos.
Desde los centros educativos hay que incentivar al estudiante a participar activamente en los procesos sociales. Motivarles a ser críticos en eventos que los afectan aportando soluciones a los problemas que aquejan a la sociedad para su desarrollo sostenido. Hacer que se aplique lo aprendido, a la realidad de la sociedad, con análisis de hechos que nos afectan.
Es indispensable romper esquemas de percepción sobre las distintas carreras que pretenden ser algunas más importantes o necesarias que otras. Desde la sociedad, en los centros educativos, se debe promover la importancia de cada campo de estudio: científico, humanístico, comercial, artístico, técnicas.
Entender que todos somos importante y desempeñamos un papel en la sociedad, debe ser enseñado en los centros educativos para que esos ciudadanos que hemos formado sean capaces, desde la sociedad y los papeles que desempeñan en ella, de exigir el perfil de egreso necesario para las distintas áreas y campos de estudio. Formando ciudadanos participativos y críticos se forma una sociedad que trabaje con el sistema educativo para el desarrollo constante de ambos, sociedad y educación.
Para que haya educación se requiere una generación de adultos y una de jóvenes, y la acción ejercida de los primeros sobre los segundos. La educación es reflexión y acción del hombre sobre el mundo para transformarlo. Uno se forma de todo estado mental sobre nosotros mismos y acontecimientos de nuestra vida, (ser individual), lo otro es un sistema de ideas, sentimientos y hábitos que reflejan no la personalidad, sino los grupos de que somos parte; creencias religiosas, creencias y prácticas morales, tradiciones nacionales o profesionales, opiniones colectivas de toda clase (ser social)
En el sistema educativo quien aprende es el individuo, aunque el aprendizaje es respuesta a estímulos del mundo externo. La educación es el principal determinante de la calidad de la persona. Es el pasaporte de los individuos y de las naciones al conocimiento en todo campo; la economía, las publicaciones, la informática, la internacionalización de la cultura, la educación. Se educa en valores y saberes universales validos y formar para la tolerancia, lo cual implica conocer y aceptar las diferencias.
Para adoptar la fórmula sobre como orientar la acción de la educación se propone, aprender a vivir juntos, aprender a conocer, aprender a hacer y aprender a ser. Para que se de el procesos de construcción del conocimiento se parte de que todo niño recibe de sus padres aptitudes generales y es la educación la encargada de potenciar las disposiciones propias de cada cual y hacernos conscientes de la realidad de nuestros semejantes. Se debe estar en una constante búsqueda en el aprender a aprender para poder trascender como seres humanos en nuestra sociedad al transformarla para construir una nación.