Durante los últimos 10 años la capacidad de energía eólica registra una tasa de crecimiento acumulada media de más de 24%. En 2010, por primera vez en la historia, hubo más generación eólica en economías en desarrollo que en las desarrolladas, mercado tradicional.

 

China es el líder en capacidad instalada, le siguen Estados Unidos, Alemania, España e India, los cinco representan 74% del total de la energía del viento en el mundo. En Latinoamérica, Brasil y México están a la cabeza.

 

En 2010, la inversión en energías renovables en el mundo fue de 210 mil millones de dólares, 32% más de lo invertido en 2009, cantidad que superó la destinada a tecnología en combustible fósil. México tenía capacidad instalada en operación de 519 megawatts (MW) de energía eólica, la previsión era duplicarla en 2011y para 2015 se multiplique por cinco, tendencia que representa un reto enorme para consolidar esta industria.

 

El gobierno mexicano tiene como meta para los próximos 15 años, que 35% de la energía que consume en país sea de origen sustentable. En este contexto, la eólica es la que más inversión ha recibido hasta el momento. La inversión rebasó en el último quinquenio los dos mil millones de dólares.

 

Se espera en la próxima década supere los 20 mil millones (Asociación Mexicana de Energía Eólica) pues los costos de generación se reducen considerablemente en los últimos 15 años, a grado de alcanzar competitividad con fuentes convencionales de energía.

 

El primer campo eólico en México fue La Venta, Oaxaca, en 1994. Es clave por su condición geográfica de privilegio con vientos superiores a los cien kilómetros por hora. Cuenta con 20 proyectos en operación con obra pública por licitación de Comisión Federal de Electricidad. Baja California 6, Jalisco y Tamaulipas, 2 proyectos cada uno.

 

La inversión (infraestructura y procesos) de la energía eólica genera ventajas competitivas fundamentales para reducir costos y ser rentable. Diversas empresas tienen papel importante en generación y uso de energía eólica; Acciona, Demex, EDF, Femsa-Macquarie, Gamesa, Iberdrola, Peñoles, WalMart, Bimbo, Grupo Modelo, Mittal, Cemex y Herdez, pues reduce el gasto en energía y permite realizar estimaciones financieras con costo fijo, pues la energía eólica no se relacionada al mercado de hidrocarburos, permite cumplir compromisos medio ambientales, entre otros beneficios.

 

El interés por la energía eólica llevó al gobierno a diseñar una política pública para aprovecharla en donde se encuentre condiciones favorables para su desarrollo en cualquier sitio del país.

 

El Programa Obras e Inversiones del Sector Eléctrico de Comisión Federal de Electricidad contempla para 2026 en obra pública financiada mil 500 MW para servicio público. En el país se genera un mercado con áreas de oportunidad que permitirá crecer de manera importante la oferta de energía eólica, que debe ser aprovechado por inversores empresarial e industrial.

 

Otra fuente de energía sostenible, constante, permanente, la genera el flujo del mar. México tiene costas al este y oeste a lo largo de su geografía, energía fácil de utilizar en sus ciudades costeras y acorde a la producción distribuir por Comisión Federal de Electricidad.

 

En las casas y terrenos libres, los paneles solares son apoyo para la economía familiar al obtener energía eléctrica barata y enorme apoyo para Comisión Federal al recibir energía sin la necesidad de invertir en infraestructura.

 

Sólo se requiere abandonar la corrupción en la toma de decisiones y así invertir en el desarrollo sustentable del país y dejar de producir fortunas privadas sacrificando el beneficio común.