¿Tiene un impacto real en los votos un mega mítin en una campaña electoral?

La percepción generalizada sobre esas concentraciones masivas, encaminadas a exhibir la fortaleza y simpatía de un candidato, es que reunir 5 mil, 10 mil o 20 mil personas en un evento no es garantía de triunfo en las urnas para quien los convoca.

En algunos casos tienen razón quienes así opinan, pero en forma paradójica también pueden estar equivocados.

Este escenario se deriva de la multitudinaria asistencia el domingo pasado, de simpatizantes de César Verástegui, “El Truko”, a un acto público llevado a cabo en forma paralela a su registro en el IETAM como candidato de la coalición Va por Tamaulipas a la gubernatura. Hay quienes calcularon hasta 30 mil almas. Impresionante, sin duda alguna.

¿Ayudará eso a Verástegui a conseguir más votos?

Eso está por verse, pero lo importante aquí –y es lo que debería preocupar a los contrincantes cívicos del ex Secretario General de Gobierno– no es que el Truko haya reunido a ese mar de votantes potencialesen un evento, sino exhibir desde ahora la estructura del candidato de la alianza PAN–PRI–PRD en lo que a su capacidad de movilización de ciudadanos se refiere.

Atención, mucha atención: Dije capacidad de movilización, no de convocatoria, dos cosas muy diferentes.

La primera es para obtener un resultado tangible e inmediato; la segunda persigue sólo un efecto mediático. Y la primera es la que vale oro molido.

Trataré de explicar este galimatías.

En la jerga electoral, una frase es muy común: Una elección se gana 40 por ciento en la campaña y 60 por ciento –atención– el día de la votación.

¿Cómo es posible que 60 días de recorrer un Estado a matacaballo, casi sin dormir para pedir el voto, sea menos importante que un solo día en el que se acude a las casillas?

Y sin embargo, así sucede en la mayoría de los casos, parodiando a Galileo Galilei

Ese es el verdadero músculo de el Truko, fortaleza con raíces netamente priíistas y que acaba de mostrar César Verástegui y su equipo el domingo pasado.

Olvide la capacidad de convocatoria, ese es un fuego fatuo que siempre puede arreglarse con recursos económicos. El Santo Grial de esta elección será la capacidad para operar dentro de la ley el “Día D” y armar una estrategia de apoyo para planchar el camino no a 30 mil militantes y bienquerientes, sino a cientos de miles. Todo, sin violar la ley o para caminar en el filo de la misma mediante una red dirigida por viejos lobos de mar, hombres y mujeres, curtidos en cientos de batallas de ese tipo.

El mítin dominguero fue, en forma lamentable para los adversarios del Truko porque hasta ahora no tienen ni por asomo esa estructura, una pálida sombra de lo que será la madre de todas las batallas:

La operación del 5 de junio…

¿CUÁL TANDEO?

Me sorprende que el Ayuntamiento de Victoria anuncie que este fin de semana venidero iniciará el “tandeo” de agua en esta capital.

La verdad, en el caso de quien esto escribe, la dotación de agua potable a intervalos es un viejo y lamentable tema, cuyos efectos los padece gran parte de la ciudad en donde desde hace meses, en forma paralela al iicio de la administración municipal actual, el abasto del liquido se cumple “en abonos”.

En más de la mitad de la capital tamaulipeca, eserecurso natural “llega” cerca de la medianoche y se interrumpe a las 10 de la mañana o en el mejor de los casos al mediodía. No sé cómo le llame a esa modalidad el ayuntamiento, pero en lenguaje llano no es otra cosa que un llano corte del servicio. Día tras día.

¿A cuál tandeo se refiere el gobierno municipal, al viejo corte o al maquillado “tandeo”?…¡Es lo mismo, sólo que con otro nombre!

Ciertamente la insuficiencia de agua tanto en la presa Vicente Guerrero como en los manantiales que surten a Victoria, no es culpa del gobierno de Eduardo Gattás, pero por favor no intenten disfrazar como novedad lo que en los hechos desde hace mucho tiempo tiene con sed a decenas de miles de victorenses…

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