Somos testigos de la manera en que se incrementó la violación de los Derechos Humanos por distintos actores, el Estado Mexicano, corporaciones y empresas nacionales y trasnacionales, grupos armados criminales e irregulares, cárteles, caciques, líderes sociales, con complacencia, indiferencia e indolencia del Estado.

La pobreza causa que millones de seres humanos no lleven una existencia digna y se vulnere sus derechos. Mil 600 millones de personas se encuentran en situación de pobreza en el mundo. En México y en Tamaulipas, más de 50% de la población está en situación de pobreza que afecta el disfrute de los Derechos pues quien está en pobreza es objeto de discriminación y marginación social afectan derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales ( alimentación, salud, vivienda; servicios básicos, educación, vestido, trabajo digno, justa remuneración, justicia, agua), y como consecuencia se vulnera el derecho más básico, el derecho a la vida.

Autoritarismo y ausencia de democracia son obstáculos que impiden el desarrollo del país, son los problemas fundamentales que enfrentamos los mexicanos. En países autoritarios, no democráticos, los derechos humanos y las libertades son poco respetados, es en ellos donde más abusos se dan. Un obstáculo político que impide se respete los derechos humanos en México es la seguridad nacional, aspecto que manipuló el Estado Mexicano para desbaratar el aparato policial, llevar a las calles a las fuerzas armadas y plantear lo que busca, reformar la ley de Seguridad Interna de manera tal que permita de manera legal vulnerar la garantía de libertad y de libre tránsito.

Se busca tener al ciudadano a su merced; se cuida a sus cómplices, crimen organizado, monopolios, transnacionales, banca, toda estructura legal o ilegal que proporcione ganancias al grupo de mando.

Tamaulipas hace más de una década que mantiene a la sociedad en estado de indefensión, lo que permite al Estado Mexicano continuar atacando a la sociedad. A través del crimen organizado llegaron y no se vislumbra cuando se acotarán, secuestro, atraco, extorsión, despojo, homicidio. El Estado Mexicano, a la Banca extranjera que radica, opera y se enriquece en el país, le permite lavar dinero ilícito, le autoriza aplicar tasas de interés súper altas y el cobro de múltiples comisiones por servicios bancarios que en la mayoría de los países son servicios que proporcionan los bancos sin cobrar, pues es parte de su función.

Las transnacionales vienen porque el Estado Mexicano les garantiza salario de explotación, concesiones y facilidades fiscales; los monopolios que el Estado creó venden sus servicios a muy alto costo con deficiencia, carencia e inconveniencias. Los monopolios de los medios de comunicación informan lo que es conveniente para manipular a la sociedad. Los inversionistas locales edifican para lavar dinero en época de crisis de seguridad pública y económica, todo bajo la complacencia del Estado Mexicano, para que sus socios operen con impunidad y continúen robando a los mexicanos.

Es complicado destruirlos pues están encubiertos, es difícil encontrar a los reales culpables pues cambian de máscara y ocultan su lado criminal operando desde dentro del gobierno, pero la red criminal tiene debilidades adonde iniciar el combate efectivo. Requiere de operarios; empresarios, contadores, abogados, médicos, notarios, constructores, banqueros, políticos, aquí radica la oportunidad para deshacer la red de crimen. El gobierno de Tamaulipas lo comprende y enfoca su atención y su capacidad de investigación para encontrar responsables y avanzar en imponer el estado de derecho que todos deseamos. Al respecto, una opinión; ya no más leyes. Cumplir con las existentes nos llevará a ser la potencia que el candidato del PRI, José Antonio Meade promete.