Con López; lealtad, honradez y capacidad no se juntan, pues él exige sumisión, corrupción, de ser posible que él no se entere, que no le manche, no lo salpique, aunque esté en la misma carta donde se acomodan las calabazas según intereses; impreparación, historial criminal, así es como se va haciendo de México; con ayuda y complicidad (la lealtad aplica a las buenas obras y causas, alineadas a valores universales) de ignorantes y traidores a la patria que están a su servicio.

Nuestra historia antes de los españoles es de violencia, conquista, sumisión al poder central, en este caso al gobierno Azteca; es de corrupción, autoritarismo más o menos disimulado, pues los mexicanos no sabemos reclamar y exigir, y traición. Pueblos indígenas se sumaron a los españoles con tal de quitarse el yugo azteca. López no coloca en su equipo a quien no le es incondicional absoluto y dada la corrupción e impunidad anteriores, comprendo la necesidad de rodearse de incondicionales, sin embargo, corrupción e impunidad se incrementan con estos incondicionales hoy gobernantes y funcionario, además ignorantes, que acatan sin chistar y legisladores que aprueban, toda barbaridad que a López se le ocurre, sea o no deseo de la mayoría de los mexicanos. Sus encuestas “levanta manos”, es muestra de su autoritarismo, caudillaje, poder absoluto. No hay representatividad social, de organizaciones, de liderazgos diversos que representen a grupos de la sociedad mexicana; son decisiones de López, el supremo.

No hay plazo que no se cumpla. Se acerca a López a la velocidad con la que gira la tierra alrededor del sol, el momento de la rendición de cuentas. Para su fortuna, hay vacío de poder en organizaciones y liderazgos que analicen los recuentos alegres de López, así que tendremos Mitoteras de éxito, de triunfo, con corona y laurel, al estilo de los emperadores omnipotentes de Roma que tocaban la lira mientras Roma era devorada por el incendio provocado. Así México, está en llamas por fenómenos económicos mundiales alentados a propósito por López; con violencia criminal que muestra su poderío y dominio sobre el territorio nacional, control que debe ser del gobierno. Insabi reconoce su fracaso para abastecer con oportunidad y en cantidad de medicamentos al sector Salud; y no tiene caso continuar con el fracaso que López propicia. Un retroceso y daño a los mexicanos que requiere de enderezar el rumbo hacia el bienestar de los mexicanos y de varias generaciones para resarcirlo.

De nada sirve para recomponer el servicio público que los mexicanos hayan dejado de recibir la educación y la salud que permitieron desarrollo en el país, ahora en estatus de abandono por una supuesta transformación que no llega ante la sangría abundante de sus recursos que se canalizan a las obras que López desea dejar a la posteridad, claro hablamos de próximas décadas; cuando López baje del poder, que no de su macho. ¿Por qué no hay educación?, para manipular con facilidad, aunado a la dádiva vía programas sociales; para tener gente que no sepa pensar y sin salud, pues a gastar lo poco que hay en el hogar para curarse, así tiene más pobres a los cuales debe cuidar, como mascotas. Es el mundo de López