El periodista y escritor Héctor Aguilar Camín (“Morir en el Golfo”, “La Guerra de Galío”) hizo ayer en su colaboración en Milenio, una certera definición que sustituye la aberrante y escurridiza afirmación de que los mexicanos nos estamos acostumbrando a vivir en la narco-violencia.
Nos parece más cercano a la realidad, que los tamaulipecos (en lo particular) estamos anestesiados por la repetición de la violencia que nos rodea. Aguilar Camín centra su colaboración periodística en su percepción de que se ha producido el efecto de una guerra en la franja poblacional de hombres jóvenes.
Decir que ya nos acostumbramos a presenciar los efectos de la violencia delincuencial, es declararnos resignados a una situación que nos ha sido impuesta y que se ha vuelto cotidiana, ordinaria y hasta normal.
Pues no, los ciudadanos ni estamos conformes, sumisos ni resignados a los derramamientos de sangre. Lo que pasa es que el nivel de incompetencia gubernamental para frenar a los infractores de la ley, hace proliferar los delitos con tanta frecuencia y estridencia, que provoca un estado de letargo ciudadano, adormecimiento, sopor.
Pero igual estamos aterrorizados. Otros tres cuerpos decapitados fueron encontrados en Río Bravo, sumando seis los hombres descuartizados en un lapso de apenas 5 días, en esa ciudad y en Reynosa. Todos tenía macabros mensajes.
También en Reynosa, un grupo de sicarios persiguió hasta a las instalaciones de Seguridad Pública a un par de amigos que huían en su camioneta BMW para impedir un levantón o el robo del lujoso mueble.
Se metieron al estacionamiento de las instalaciones de los cuerpos de seguridad pública pero ni así dejaron de echarles bala los sicarios, hasta alcanzar uno de los proyectiles al conductor.
Cuando se percataron que se les escapó la presa de las manos, los delincuentes dieron vuelta y huyeron por el bulevar Morelos sin ser perseguidos ni mucho menos identificados pues las video-cámaras instaladas en la ruta siguen siendo de adorno, 13 meses después de instaurado el gobierno estatal, panista.
También en Reynosa, la empresa clausurada por el gobierno del Estado por presumir que sirve de instrumento financiero a los grupos delincuenciales, publicó un desplegado periodístico para informar que entregó a los funcionarios todos los permisos solicitados, que comprueba que opera dentro de la ley.
Más de doscientos empleados quedaron cesantes con esta acción del gobierno estatal, panista.
También hay problemas por el rumbo del PRI, pues Sergio Guajardo Maldonado reconoce que los empresarios que han sido invitados a incorporarse a la actividad política, declinan por temor a represalias gubernamentales.
Ofrecen seguir trabajando por el partido tricolor, pero con sigilo, discreción, por debajo de la mesa, porque si dan la cara, se expondrían a ser vetados en los concursos de obra pública, no del gobierno del Estado, porque ni los invitan, pero sí en gobiernos locales hasta donde llega el brazo vengativo de los vientos del cambio.
El presidente estatal del PRI declaró desierto el Instituto Político Empresarial y la comisión de recaudación de fondos. Viven al día, la pasan bien, pero cuando lleguen los tiempos de las campañas, entonces pasarán apuros.
No son pocos los políticos-políticos que también han tomado una actitud prudente por no decir que pusilánime, frente al gobierno estatal, panista, pues saben que tienen la mano pesada y prefieren hacer mutis, no alzar la voz y fingir que la Virgen les habla.
La excepción es Edgar Melhem Salinas, pero él porque siempre ha sido entrón, gallito y osado, para no hablar que busca ser Senador de la República y que le adorna poner banderillas.
En otros temas, Nuevo Laredo fue sede de una reunión estatal preparatoria del desarrollo energético de Tamaulipas, donde escucharon las experiencias del Clúster de Energía Coahuila, dirigido por Rogelio Montemayor Seguy, para aplicar ese modelo aquí.
Enrique Rivas Cuéllar dio la bienvenida al distinguido empresario, ex Gobernador de Coahuila, ex director general de PEMEX y destacó la importancia de abrir nuevos horizontes de desarrollo para Tamaulipas.
Se debatieron temas como el potencial de hidrocarburos y los retos para su desarrollo en Tamaulipas, órganos reguladores de la reforma energética, perspectiva de proveeduría y otros importantes asuntos.
También estuvo presente en la reunión, Andrés Cusco Clynes, coordinador estatal de Energía.
En tanto que en Matamoros, el gobierno municipal estableció con el Grupo de Coordinación Matamoros, un operativo especial de vigilancia y seguridad para garantizar el orden durante el desfile tradicional de la Revolución Mexicana, el lunes 20 de noviembre.
El Secretario del Ayuntamiento Abelardo Martínez Escamilla conversó con los oficiales de SEDENA y SEMAR, así como de Fuerza Tamaulipas y Policía Federal, para intercambiar información sobre este operativo.
Desfilarán alrededor de cinco mil estudiantes y docentes, en 54 contingentes y 15 carros alegóricos, en la ruta de la calle Sexta y al pasar por el palacio municipal, saludarán al jefe de la Comuna Jesús de la Garza Díaz del Guante y a autoridades militares y del magisterio.
En temas políticos, trascendió que Oscar Luebbert Gutiérrez tendrá mano en la designación de los candidatos en Reynosa y ya tiene definido que Amelia Vitalesy Benito Sáenz Barella vayan por sendas diputaciones federales.
En Tampico y Altamira, las dos presidentas municipales tienen problemas por culpa de sus agentes de tránsito, pues Magdalena Peraza Guerra encara una demanda judicial por delitos como robo, abuso de autoridad, etcétera, en tanto que la señora Amparan, de Altamira, es señalada como responsable de que sus tránsitos sean corruptos.
Peraza Guerra ordenó incautar el vehículo de una particular y esconderlo en el patio del palacio municipal, dizque para garantizar el pago de la reparación de un daño al hijo de un oficial de tránsito.
En Altamira, el diputado local José Ciro Hernández acusó a la señora Amparan de mandar a la calle a los agentes viales a aplicar multas recaudatorias o a pedirles dinero a los automovilistas.
Cerramos la colaboración con un apunte de agua-fiestas. Se publicó un boletín oficial presumiendo que policías estatales y de la Procuraduría asisten a un curso de capacitación dictado por oficiales de las principales agencias de seguridad de Estados Unidos.
Exageran. Se trata de sólo un taller de estrategias policiacas México-Estados Unidos, con una duración de tres días, aunque no todas las horas. No es capacitación, solo información, y a veces con temas que les son ajenos, como fraude de visas y pasaportes.
Pero es bueno el intento aunque no se asemeja a la promesa de campaña, de que todos los policías tamaulipecos serían adiestrados, capacitados y certificados en Estados Unidos.
Correo electrónico: albertoguerra65@hotmail.com