Desde 2021, en que el entonces gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, estuvo a punto de perder su inmunidad y ser sujeto a un proceso judicial, en Tamaulipas no se había presentado otro planteamiento similar. Al igual que ahora con el caso Danés, la orden de aprehensión partió de la Fiscalía General de la República,

Hoy Edgar Danés Rojas está encaminado a ser sujeto de un juicio político, precisamente este martes 17 en el Congreso del Estado se estaría empezando a escribir la historia formal de este caso.

Tal como se observa el horizonte, Danés perderá el fuero que se le otorgó en su calidad de magistrado (presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial), esa es la llave para entrar a un litigio.

Retrocediendo en el tiempo, “la nube” de Cabeza de Vaca estaba más cargada. Entre las acusaciones que se formularon en contra de él, figuraron: el testimonio del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, quien lo acusó de recibir sobornos para aprobar la reforma energética; se integró una carpeta de investigación por la UIF (Unidad de Inteligencia Financiera) y el Ministerio Público, con pruebas referentes a triangulaciones superiores a los 42 millones de pesos tan solo en 2019.

Otro cargo fue la creación de empresas fantasmas para el lavado de dinero utilizando contratos del servicio público, lo menos fue la defraudación fiscal por 6 MDP.

El desenlace usted ya lo sabe, Cabeza de Vaca se amparó y un juez federal concedió tanto la suspensión provisional como la definitiva para que no surtiera efectos la orden de aprehensión.

Ese episodio tuvo un trasfondo político, por cierto Lozoya es compadre del presidente AMLO, pero nadie puede negar que después de esos hechos de 2021, a FGCV se le terminaron sus aspiraciones presidenciales y su actitud “entrona”, usted recordará que exigía mayores recursos a la federación, incluso sacó a la luz números sobre lo que aportan a los estados y particularmente a Tamaulipas, y lo poco que se les retribuía a las entidades federativas, algunas de ellas que generan importantes recursos monetarios.

Por lo que respecta a Edgar Danés, no está en ningún supuesto de aspiraciones políticas, las acusaciones de acoso sexual hoy formalizadas, es un tema de rumores que lo ha rodeado en diferentes tiempos, que por lo penoso para las víctimas no pasaba de simple trascendidos, que por cierto son difíciles de probar.

Por lo pronto, y en un lapso donde no hay elecciones, las próximas serán en 2027, se da la oportunidad de cambiar a Edgar Danés de “aparador”, desaparecer del escenario político-electoral, y de la cabeza del Tribunal Electoral, que en estos tiempos, es el organismo que tiene la última palabra en el desenlace de los comicios.

Danés Rojas por su trayectoria y vínculos, no pertenece a los tiempos de la transformación, tiene raíces de otros partidos y otros grupos con los que se formó y los que le dieron oportunidades a lo largo de su formación académica y profesional. Esta es la coyuntura para un cambio de ruta, que puede ser saludable para él y para el clima político de Tamaulipas.