Por fin empieza a concretarse una promesa que durante años se usó como bandera electoral en Tamaulipas y que nunca se cumplía, la reclasificación de las tarifas de energía eléctrica.
Cada proceso electoral escuchábamos lo mismo. Todos los candidatos prometían bajar el recibo de la luz, todos hablaban del calor extremo y del golpe al bolsillo y al final, nada. Por eso, que hoy se anuncie que cinco municipios de Tamaulipas tendrán una reducción en sus tarifas eléctricas a partir del próximo año sí representa un avance real, aunque todavía sea parcial.
Abasolo, González, Güémez, El Mante y Padilla serán los primeros beneficiados. Para las familias de estos municipios, esto significa pagar una tarifa más justa, acorde a las condiciones climáticas que se viven todos los días y no solo en el papel.
La realidad es que la mayoría de los municipios de Tamaulipas estamos clasificados en tarifas 1B o 1C, que corresponden a climas cálidos moderados. Pero cualquiera que viva aquí sabe que eso no refleja lo que realmente padecemos. En ciudades como Victoria se han roto récords históricos de temperatura a nivel nacional, asi que moderado no tiene nada.
El problema es que el calor obliga a consumir más energía. Más abanicos, más aire acondicionado, más horas encendidos. Y cuando una familia rebasa el límite permitido, el subsidio desaparece y el kilowatt se cobra hasta cinco veces más. Ahí es cuando llegan los recibos impagables que tanto reclamo generan.
Cada verano se repite la misma historia. Familias y pequeños comercios se queja de recibos inflados, muchos caen en tarifa de alto consumo y aunque Profeco recibe quejas, la verdad es que poco o nada puede hacer porque el fondo del problema es la mala clasificación tarifaria.
En un encuentro con medios de comunicación, el gobernador y el Secretario de Energía informaron que se han instalado mesas técnicas permanentes con la CFE y la Conagua para revisar municipio por municipio, comparar cifras y detectar problemas; el objetivo es lograr la reclasificación de los 43 municipios del estado.
Cinco municipios son apenas el inicio, pero es un paso que no se había dado en años. Ahora falta que este avance no se quede a medias y que el beneficio llegue a todas las familias tamaulipecas que cada verano sufren por el calor y por los recibos.
Que Dios los bendiga, gracias.
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