México sacó la casta y en su debut en el Mundial Sub 20 rescató en los últimos minutos el empate 2-2 ante Brasil, que lo tiene en pie de lucha para su siguiente partido ante España.

El equipo nacional inició proponiendo, abriendo espacios, con un futbol ofensivo por las bandas, que sorprendió a los sudamericanos.

Al minuto 10, Alexei Domínguez puso el 1-0, luego de una brillante jugada que comandó Gilberto Mora por el sector de la izquierda, el volante de Tijuana mandó un centro que remató Tahiel Jiménez con la cabeza, el portero Otavio rechazó y le quedó a modo a Domínguez quien no perdonó.

A petición del cuerpo técnico de Brasil se revisó una jugada en el área en la que se pidió mano, pero tras la observación del árbitro, Maurizio Mariani, consideró que la posición del brazo de Rodrigo Pachuca fue natural y no concedió la pena máxima.

Cabe recordar que en este Mundial, la intervención del video asistente solo se da cuando la solicitan los entrenadores y ya no se usa el VAR, como se hace en otras competencias.

Casi de inmediato, el conjunto verdeamarello respondió con un golazo de Countinho quien metió un zapatazo y anotó el 1-1 al 21′.

Para el complemento, bajó el ritmo de los dirigidos por Eduardo Arce, se diluyeron y perdieron fuerza.

Vinieron varios ajustes para retomar el control del encuentro, pero el cuadro nacional tardó para recomponerse en la cancha.

México se salvó de un autogol al 70′ y cinco minutos más tarde, Luighi hizo el 2-1, remató en el área y le ganó a la zaga de México en una jugada a balón parado.

El Tricolor no bajó el ritmo ni la insistencia en la portería de la verdeamarella.

En una de las últimas jugadas, el central Diego Ochoa encontró el empate 2-2 al 86′, luego de una asistencia de Mora quien fue un hombre clave en la ofensiva del Tricolor.

Ochoa se despachó un cabezazo bien colocado y el arquero de Brasil no pudo hacer nada.

Al 90′, México solicitó revisión por una jugada en la que se pidió roja para Erick Bele, pero el colegiado no consideró que ameritara la expulsión y dejó todo en amarilla.