El mexicano Sergio Pérez (Red Bull), que este domingo logró su segunda victoria en Fórmula Uno al ganar el Gran Premio de Azerbaiyán, emuló a su compatriota Pedro Rodríguez -dos veces ganador en la categoría reina- al tiempo que logró, con el coche 11, su undécimo podio en su undécima temporada en la división de honor del automovilismo.
Checo, nacido hace 31 años en Guadalajara (Jalisco), que había ganado la penúltima carrera del año pasado, en Sakhir (Barein), igualó a Pedro Rodríguez -el mayor de los hermanos que dan nombre al Autódromo de Ciudad de México-; que, antes de fallecer accidentado, el 11 de julio de 1971, en las 200 millas de Norisring, en Nüremberg (Alemania), había ganado los Grandes Premios de Suráfrica, en 1967; y de Bélgica, tres años después.
Entre su primer podio, en Malasia, y éste, su tercero -y más preciado- en Azerbaiyán, pasaron nueve años y dos meses; pero este domingo, además de festejar su primera victoria con Red Bull, Checo logró su undécimo podio en Fórmula Uno, categoría en la que pilota el coche número 11 y en la que afronta su undécima temporada. Firmó este domingo el 11 del 11 en la 11. Exactamente seis meses después del anterior, que coincidió con su primera victoria, el pasado 6 de diciembre en el Gran Premio de Sakhir, la segunda de las dos pruebas que albergó Barein el año pasado, coincidente con su décimo podio.
Checo subió por tercera vez al podio en la que sin duda ya puede considerar su pista talismán, en la que también hizo ‘cajón’ en 2016 -cuando Bakú debutó, como Gran Premio de Azerbaiyán- y en 2018.